Cuándo: hasta el 4 de noviembre. Dónde: Real Academia de Bellas Artes de San Fernando. Madrid. Cuánto: 5 euros.
«Tenemos que buscar un notario para la firma de la escritura». ¿Quién no ha pronunciado una frase similar en algún momento de su vida? ¿Qué es un notario? Por definición, un «funcionario público autorizado para dar fe de los contratos, testamentos y otros actos extrajudiciales» y, como segunda acepción, un «cronista o narrador de ciertos acontecimientos». Con el objetivo de reivindicar la labor notarial y celebrar los 150 años de la Ley del Notariado (la norma vigente más antigua del ordenamiento español), la Real Academia de Bellas Artes acoge una completa exposición con el título de «Comparece España: Una historia a través del notariado» en la que se recogen más de un centenar de obras que ponen de manifiesto la influencia y el papel que han desempeñado estos funcionarios públicos en la historia de España. También se destaca la presencia de los archivos notariales como lugares en los que se atesoran documentos que nos hablan de la historia española, de las vidas de grandes personajes, pero también de vidas privadas, anónimas, con innumerables detalles cotidianos, ventas, herencias, testamentos, contratos, pleitos...
Veintidós han sido las instituciones públicas y privadas que han cedido sus obras para esta muestra, dividida en cinco secciones (la función notarial, precedentes históricos, asentamiento, etapa moderna y futuro). Así, en las diferentes salas nos toparemos, además de con legajos y abundante papel, con obras de arte de primera magnitud, como óleos de Alonso Cano, Lucas Velázquez, Goya o de la escuela de los Madrazo (como un lienzo de Isabel II vestida con un vaporoso traje azul). Entre los documentos expuestos, piezas únicas como los testamentos de Isabel la Católica, Felipe II o Carlos III, además de los de Lope de Vega o Calderón de la Barca, junto a téseras romanas, relieves y estatuas egipcias de escribas en terracota. Para el historiador Fernando García de Cortázar, comisario de la muestra, «la historia de España no se puede contar sin los notarios». A su juicio, «los documentos notariales de esta exposición son actas reveladoras de los profundos cambios que han tenido lugar en el transcurso de los siglos en España».
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