"No pienso abandonar mis convicciones". Así de rotundo se mostró Tonio Borg en su comparecencia ante la Comisión de Medio Ambiente del Parlamento Europeo. En sukma, que ni renuncia a sus valores católicos por una poltrona en la Comisión Europea como titular de la cartera de Consumo y Salud Pública. Eso sí, en caso de que su candidatura sea aprobada, se ceñirá a los prtevisto por los tratados europeos en vigor.
Propuesto por Malta como comisario de Salud y Política de Consumo para sustituir a John Dalli -dimitió tras una investigación por presunto tráfico de influencias- Tonio Borg se ha visto atacado por sus convicciones personales y son muchos los lobbies homosexuales y de ideología de géneroque presionan a los eurodiputados para que el veredicto sobre Borg sea hoy negativo.
Aunque el resultado de la comparecencia de hoy no es vinculante –su nombramiento tendrá que ser ratificado por el Consejo europeo antes de finales de mes- sí tendrá mucho peso en la decisiónposterior de los representantes europeos y en ella tendrá que responder a preguntas de las comisiones parlamentarias de, por ejemplo, Medio Ambiente, Salud Pública, Mercado Interior y Protección del Consumidor, Agricultura y Desarrollo Rural.
Habrá que esperar para saber si el Parlamento valora las cualidades profesionales de Borg o si son sus convicciones y su fe religiosa las que, en una suerte de juicio popular, deciden su futuro en la UE.
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