FAMILIAS QUE AYUDAN A FAMILIAS.

Propuesta del Papa hecha realidad

El Papa lanzó la liebre en el VII Encuentro Mundial de las Familias, en Milán. Cinco meses después, su propuesta de que unas familias ayuden a otras se ha materializado en diversas iniciativas esparcidas por toda la geografía española. Benedicto XVI, en la Fiesta de los testimonios, pedía ayuda «en sentido concreto», y aquí la tiene:

Si ves a tu hermano en necesidad...

Los creyentes vivían unidos, repartían los bienes

entre todos, según la necesidad de cada uno

Uno de los momentos más emotivos del Encuentro Mundial de las Familias de Milán tuvo lugar en la noche del sábado 2 de junio pasado, en la Fiesta de los testimonios. Entre otros, se escuchó el de Niko y Pania, de la familia Paleologos, que hablaron en tercer lugar. El Papa confesó que la historia le llegó al corazón. El matrimonio griego había contado que cada vez tenían más dificultades para llegar a fin de mes. La crisis les estaba dejando sin nada, incluso les intentaba arrebatar la esperanza: «Nos cuesta pensar en un futuro para nuestros hijos», dijeron. Tras exhortar a los políticos a dar respuesta a este tipo de problemas, el Papa invitó a las propias familias a ayudarse entre sí. Es necesario que «una familia de Occidente, de Italia, de Alemania, de Francia... asuma la responsabilidad de ayudar a otra familia», y lo haga «en un sentido concreto», pidió Benedicto XVI.

Esa invitación es hoy una realidad. Diversas instituciones han creado por toda España iniciativas concretas en las que diversas familias ayudan a otras que pasan dificultades. Cada una en su medida. Unos más, otros menos, pero todos con la intención de ayudar a los más necesitados.

Valencia

En Valencia, lugar donde se celebró el anterior Encuentro Mundial de las Familias, en el año 2006, tuvieron una especial acogida las palabras del Papa. La Gran Asociación Nuestra Señora de los Desamparados ha puesto recientemente en marcha el ProyectoApadrina una familia. Una de las familias beneficiarias es la conformada por un padre viudo y sus tres hijos de 17, 15 y 13 años. En el hogar, no entra ningún ingreso. Lo que sí hay son muchos gastos, en particular un alquiler de 330 euros.

Al proyecto también se acoge un matrimonio con 3 hijos de 18, 12 y dos años. El padre se encuentra en el paro y cobra un subsidio de desempleo de 424 euros, único ingreso con el que cuenta la familia, que sólo en alquiler ha de pagar 450 euros al mes.

Hay muchos otros ejemplos, como el de un matrimonio con 4 hijos, sin ningún ingreso y sin subsidios; o una madre con sus 3 hijos, separada de su marido por malos tratos, y cuyo único ingreso es la pensión de invalidez que tienen por el 73% de discapacidad del hijo mayor.

«Se detectó que, cada vez más, el perfil de las personas solicitantes de nuestros clásicos programas de ayudas puntuales cambiaba. Ya no eran inmigrantes, mayores, etc..., sino familias de profesionales que habían vivido de manera holgada y se les terminaban las prestaciones», asegura don José Luis Aguirre, Director de la asociación. «El arzobispo de Valencia, monseñor Carlos Osoro, nos trasladó esa idea que había expuesto el Papa en Milán. De esta manera, nuestro programa consiste simplemente en generar puentes entre las familias mejor tratadas por la crisis y las de grave desamparo», añade.

La Gran Asociación puso en marcha el proyecto, en el que las familias, o empresas hacen llegar una ayuda estable o puntual a familias necesitadas, en función de sus respectivas posibilidades y necesidades.

Madrid

También ha recogido el guante lanzado por el Papa la nueva Fundación Fuentevea, en Madrid, surgida de «un conjunto de padres que estaban sensibilizados con los problemas de otras familias que, debido a la crisis, se planteaban abandonar el colegio», asegura el Director, don Julio Barrilero.

Las familias, y todo aquel que quiera colaborar, crearán un fondo de dinero con el que se «ayudará, para empezar, a 70 familias, por un importe superior a 120.000 euros», aseguró el Presidente, don Jesús Trillo Figueroa, abogado y padre de alumnos de uno de los colegios donde nació la idea, en la carta de presentación.

En Madrid, muchas familias tienen cada vez más dificultades para hacer frente a sus gastos», explica Trillo. Uno de cada tres niños en edad escolar, por ejemplo, tiene padres con serias complicaciones para adquirir los libros de texto, algo comprensible, teniendo en cuenta que, en la capital, el promedio de gasto en material escolar para una familia con dos niños asciende a 450 euros al mes. La Fundación Fuentevea «nació con un doble objetivo: la puesta en marcha de una educación de calidad y el acceso de las familias más desfavorecidas a esa educación», asegura el Director.

Santander

Otro proyecto de ayuda entre familias se ha puesto en marcha en Santander, con la peculiaridad de que la iniciativa parte del Ayuntamiento. Las familias, y diferentes actores, pueden ayudar a otras familias que están pasando por momentos difíciles, a través del programa Apadrina una familia, que pretende «ayudar a las familias que están atravesando dificultades económicas, para lo que se otorga una ayuda mensual de 150 euros», explican desde el consistorio. El Ayuntamiento actúa de puente institucional, pero son las familias y las instituciones colaboradoras las que ayudan a otros matrimonios y a sus hijos a superar o mitigar en lo posible la crisis.

José Calderero