Alex y Berna en el Mesón "Los Caños"
Íbamos terminando una pequeña caminata alrededor del pueblo cuando de pronto escuchamos voces amigas que nos saludaban. Se trataban de Alex y Berna, dos buenos amigos, de los de verdad, aunque mejores personas.
Estaban descansando tras haber jugado un partido de pádel del Campeonato Local. Después de haber gastado energías ahora les tocaba el descanso que disfrutaban tras haber desayunado en el Mesón "Los Caños".
Los conozco desde hace un año, justamente el tiempo que llevamos en Villaluenga, y puedo decir sin temor a engaño ni caer en la exageración que se tratan de dos personas que valen mucho la pena.
Se esfuerzan a diario para salir adelante con sus mejores armas: La ilusión, el esfuerzo, la formación, la esperanza. Son jóvenes preparados para coger los toros que le toquen en la vida por los cuernos.
Son de esas personas que siempre tienen algo en la cabeza, siempre están ilusionados y esperanzados por lo que pueda venir porque saben que el futuro, por edad, es su tiempo. Todos ambicionamos un futuro mejor aunque nosotros estamos instalados en el presente. Ellos, en cambio, tienen toda la vida por delante. Están empezando a vivir ahora y tienen todo el tiempo del mundo en sus manos.
Berna siempre tiene en la cabeza cosas del Casino de Villaluenga del que es Secretario General, al igual que lo fue hasta su muerte su querido y admirado padre, y Alex es un apasionado del "Toro de Cuerda" que el pasado sábado fue el gran día en nuestro querido Pueblo.
Dos buenos deportistas, aficionados al fútbol así como a los toros. Lo mismo se les puede ver viendo animadamente un buen partido del Real Madrid como disfrutando en vivo y en directo de una corrida de toros en El Puerto de Santa María.
Los dos tienen como novias a dos buenas mujeres que le acompañan en este incipiente camino de la vida.
No tuve el honor de conocer al padre de Berna aunque lo conozco por todo cuanto me ha hablado su hijo así como muchos de los vecinos del Pueblo que lo querían y admiraban aunque si conozco a su madre y su hermana que son dos bellísimas personas. En cambio si conozco a los padres de Alex y puedo decir que también los admiro mucho porque son de esas personas que sacan fuerzas donde no las hay para sacar su casa adelante. Es un auténtico privilegio el conocer y tratar a las familias de estos dos buenos amigos.
Mis queridos Alex y Berna: Sois admirables porque con vuestro pundonor, vuestra entrega diaria, vuestras ilusiones compartidas, vuestro trabajo en pos de hacer una la vida más fácil a todos los que os rodeamos estáis consiguiendo que los que peinamos ya alguna que otra cana veamos el mundo con ilusión y esperanza por la juventud sana y emprendedora que representáis.
Y cuando vengan los nubarrones siempre habrá un buen libro o una buena charla que lo disipe todo. Nunca olvidéis que todo tiene arreglo.
Gracias por vuestra amistad que me la demostráis día a día.
Un fuerte abrazo,
Jesús Rodríguez Arias
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