La familia, que ha expresado su deseo de que los actos de despedida sean lo más íntimos posibles, instalará la capilla ardiente en el tanatorio de San Isidro, en Madrid y celebrará el próximo miércoles un funeral en la Parroquia Santa María de Caná, en Pozuelo de Alarcón.
Irene Vázquez, de cuarenta años, era madre de cinco hijos, el último de ellos, nacido hace unas semanas. Fuentes del entorno de la familia han asegurado a Vanitatis que días después de dar a luz a su quinto hijo hace dos semanas, Irene sufrió un accidente cardiovascular masivo del que no se ha recuperado. Desde el día del accidente la familia, que pertenece a los Legionarios de Cristo, había celebrado una misa diaria para rogar por su recuperación. Su fe será ahora el mejor apoyo para hacer frente a esta tragedia.
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