La Conferencia Episcopal de EE.UU. se ha visto obligada a movilizarse para frenar una normativa que no defiende el derecho a la vida y que perjudicaría gravemente a la libertad de conciencia de los católicos.
Acaban de lanzar una "Alerta Urgente de Acción " en la que invitan a los creyentes a escribir al Congreso para que recapaciten sobre esta norma y presten su apoyo a la Ley de respeto a los derechos de conciencia.
Los demócratas han criticado a los obispos por lo que consideran una intromisión ilegítima en la vida política, sin embargo, los obispos aseguran que no se están metiendo en la batalla electoral sino que simplemente alertan contra una norma concreta.
'Obamacare'
El sistema de salud de Estados Unidos necesita una buena reforma, pero no la clase de cambios decretados por la nueva ley de atención médica.
La Ley de Protección al Paciente y Cuidado de Salud Asequible (PPACA), comúnmente conocida como 'Obamacare', arrastra al sistema de salud de EE. UU. en la dirección equivocada.
Esta ley tan impopular impone control federal sobre beneficios y financiación de la atención médica, establece un complejo sistema de salud de modelo único y centraliza las decisiones de la atención médica de América en Washington.
En lugar de eso, el Congreso debería transformar el sistema de salud en uno que empodere a personas y familias – no a Washington – para controlar un mayor número de decisiones respecto a su atención médica.
La libertad religiosa
La medida, que entrará en vigor en 2013, ha despertado el rechazo de los católicos y del Partido Republicano, pero también de cristianos ortodoxos y protestantes evangélicos, luteranos, así como de grupos vinculados incluso a legisladores demócratas.
Es un unión sin precedentes. Afirman que la medita abortista de Obama viola la libertad religiosa y de conciencia.
Presión sobre la Administración Obama
El presidente de la Liga Católica, Bill Donohue, advierte que 70 millones de católicos están listos para ir a la guerra con los dictados de la Administración: "No hay precedentes en la historia de Estados Unidos, en una lucha del gobierno federal contra los católicos. Va a ser combatida con acciones judiciales, y, manifestaciones en las calles".
La Conferencia de Obispos Católicos de EE.UU. ,y, por lo menos 153 obispos católicos de todo el país, se han manifestado en contra de Obama. "Los católicos se verán obligados a violar sus conciencias, o, a no cumplir la cobertura de salud y sufrir las penas", escribió de Michigan. Las sanciones incluyen multas que podrían costar millones de dólares al año. La Iglesia Católica no es la única oposición de la Obamacare contra la libertad religiosa. David Addington, presidente de la Fundación Heritage, da fe de los numerosos fieles que dicen que el gobierno de Obama ha cruzado una línea muy peligrosa.
La Asociación Nacional de Evangélicos, comentó: "Las reglas del HHS son pisotear nuestros más preciados derechos y libertades".
La Unión de Congregaciones Judías Ortodoxas de América declaró: "Al negarse a ampliar la exención religiosa dentro de la ley de reforma de la salud, el gobierno de Obama nos ha decepcionado. No respeta las necesidades religiosas de organizaciones tales como hospitales, organizaciones de bienestar social y mucho más". El 'Israel América Agudath', manifestó su oposición, al igual que la 'Iglesia Luterana Sínodo' de Missouri.
"Obama ha declarado la guerra a la Iglesia católica"
Los candidatos republicanos a la presidencia norteamericana, los católicos Newt Gingrich y Rick Santorum, y el mormón Mitt Romney se han puesto en pie contra la decisión de la administración Obama.
Tanto Gingrich como Santorum criticaron en un debate retransmitido por televisión, la decisión del presidente estadounidense, que han tachado de anticatólica y poco acertada. "En resumidas cuentas, Obama ha declarado la guerra a la Iglesia Católica", ha comentado el primero.
En relación a si esta decisión pasaría factura a Obama en las elecciones presidenciales de noviembre, Gingrich se ha limitado a afirmar que existen "millones de personas molestas con este tema".
De otro lado, también en el ámbito católico, el senador republicano de Florida, Marco Rubio, ha presentado un proyecto de ley para que las instituciones de esta confesión queden exentas de la cobertura obligatoria de anticonceptivos en los planes médicos que ofrecen a sus empleados.
Por su parte el aspirante republicano a la Casa Blanca Mitt Romney, lanzó en las redes sociales una campaña contra lo que considera un "ataque a la libertad religiosa" en los Estados Unidos. "Si estás harto de los ataques de la Administración Obama contra la libertad religiosa, únete a mí y firma esta petición", asegura Romney en su cuenta de twitter.
Los votos católicos
Obama ganó en 2008 los votos del 54% de los católicos. Un colectivo importante, puesto que suponen una cuarta parte de la población norteamericana y cuentan con una amplia representación en Estados decisivos como Ohio, Pensilvania y Wisconsin.
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