jueves, 24 de julio de 2014

* HOY ES UN DÍA DE RECUERDOS, ORACIÓN Y SILENCIO: A IGNACIO, ANTONIO, ROSA, FRANCISCO Y ESPERANZA.

A estas horas de la noche quiero dejar escrito como el último post del día la reflexión que publico todos los días en Facebook y que después traslado a reflexionesdesdeeltren.blogspot.com y que tiene como fin el trasladar a palabras los sentimientos que me inundan cuando se ha cumplido justamente un año del accidente ferroviario de Santiago de Compostela y que se llevó para siempre a tantas vidas y en especial a Ignacio, Antonio, Rosa, Francisco y Esperanza.

Hoy es un día de recuerdos, muchos recuerdos, oración y profundo silencio.

Jesús Rodríguez Arias

------------------------------------------------------------------------------------------------------------------


Buen día nos de Dios. ¡Hace ya tan sólo un año! Hace un año del accidente ferroviario de Santiago de Compostela en las que perdieron la vida decenas de personas y destrozaron la misma de tantas Familias, amigos que en menos de nada fueron arrancados de nuestro día a día que no de nuestras vidas. Un año ya sin Ignacio, Antonio, Rosa, Francisco y Esperanza, un año desde que partieron de la tierra del apóstol Santiago hacia la Tierra Prometida que es gozar de Dios en la Gloria Eterna. Un año sin Ignacio Bustamante, sin ver su sonrisa, sin conversar de lo divino y lo humano aunque nosotros perdíamos el norte hablando preferentemente de lo divino. Un año donde la tristeza confortadora en el Señor ha acompañado a sus Familias, amigos, a los que quiso y quisieron, un año de luto para muchos lugares de España y para San Fernando por la irreparable pérdida de cinco de sus predilectos hijos. Un año en el que hemos aprendido que la muerte no es el final sino el principio de la Vida junto a Maria que es Gracia y Esperanza nuestra y junto a Cristo que con su Pasión, Muerte y Resurrección nos ha enseñado el sentido se todo cuanto nos acontece por más desgarrador y doloroso que pueda ser. Hoy es un día inmejorable para rezar y recordar a estos hermanos nuestros que han muerto y han resucitado en el Señor. Recibe, mi querido hermano, un fuerte abrazo y que Dios nos siga bendiciendo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario