En Kontum, Vietnam, el padre Tran Si Tin, C.Ss.R., de la congregación católica de Gia Lai, diócesis y provincia de Kontum en las tierras altas centrales, denuncia la grave violación de los derechos humanos y religiosos hecho incluso por el jefe de la municipalidad Ayun contra un grupo de voluntarios de la Iglesia que el 17 de diciembre entregaba las mantas donadas por la gente para los huérfanos de la ciudad. Lo informó hoy la agencia FIDES, con un artículo firmado por Joseph Dang.
Su misión se llevó a cabo en nombre del padre Tin, demasiado viejo y no físicamente capaz de realizar un trabajo en las zonas montañosas. Pero a mitad de camino el grupo fue detenido por la policía local que ordenó dar marcha atrás, sin haber terminado la obra que habían empezado a realizar. Peor aún, el líder del grupo, Kpuih Bop Plei Chep Ha sido tomado especialmente en la mira, perseguido y torturado por Dat Nguyen Van el jefe del Partido Comunista de la ciudad de la aldea de Ayun. Bop ha tenido múltiples lesiones internas y tuvo que ser hospitalizado.
"No hay libertad en la ciudad de Ayun ", comentó el decepcionado padre Tim. "Como se trata de una zona aislada, las actividades católicas a menudo son prohibidas y por lo tanto todo lo relacionado con la religión recibe esta reacción inmoral por parte de los funcionarios. Uno no puede hablar de religión en este municipio".
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