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Miles de gaditanos rezaron ayer por la tarde el Rosario en público. El llamamiento del obispo Rafael Zornoza, quien animó a participar a todos los gaditanos en esta celebración católica, tuvo éxito entre los parroquianos. Gran parte de la ciudad siguió así una de las últimas indicaciones del Papa emérito Benedicto XVI, quien convocó durante este año, el de la Fe, a un tiempo especial para que los católicos meditasen sobre sus creencias, entendiéndolas como un don, un ejercicio personal y comunitario para el conocimiento de Dios. Uno de los principales objetivos que marcó el Pontífice fue que la fe fuese profesada «de modo contundente y en público»: en las catedrales, parroquias, comunidades religiosas y en las familias. Y en esto se volcó la ciudadanía ayer por tarde. Las hermandades y cofradías gaditanas organizaron el Rosario público por el Año de la Fe, en el que procesionaron cinco imágenes: Nuestra Señora de los Desamparados, que adelantó su tradicional procesión a ayer para participar en el Rosario; la imagen de María Milagrosa, cuyo cortejo lo organizó la Sagrada Cena; Nuestra Señora de las Angustias, de la Hermandad del Caminito; Nuestra Señora de la Paz, con el cortejo a cargo de la Vera Cruz; Nuestra Señora del Rosario Coronada, que salió la última, a las ocho menos cuarto de la tarde desde San Antonio.
La celebración arrancó a las 19.00 horas desde la Parroquia de San Antonio, en la que se pudo contemplar la imagen de la Santísima Resurrección de Nuestro Señor Jesucristo. Tras rezar el Angelus comenzó el Santo Rosario con el siguiente itinerario: Plaza de San Antonio, calle Ancha, José del Toro, Columela, San Francisco, calle Cristóbal Colón, Cobos y Plaza de la Catedral.
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