Hoy Domingo que la Iglesia celebra la Solemnidad del Cuerpo y Sangre de Cristo he decido finalizar mi colaboración a modo de artículos de opinión en INFORMACIÓN en el apartado que dirige y coordina mi buen hermano Pepe Moreno Fraile. Volveré, si Dios así lo quiere y me da salud, pasado el verano como es normal en mí.
Y he querido despedirme mostrando mi APOYO a la participación de mi querida Hermandad Sacramental de los Afligidos, de nuestros queridos Titulares, en el Vía Crucis Magno que se está preparando a realizar en Cádiz el próximo año con motivo del 750 aniversario de la Diócesis de Cádiz y Ceuta.
Y lo APOYO porque es una invitación expresa del Obispado de Cádiz por medio de la Delegación Espiscopal de Hermandades y Cofradías.
Y lo APOYO porque es una oportunidad única e histórica para nuestra querida Hermandad además de un privilegiado honor.
Somos Iglesia y estamos obligados a evangelizar y este Vía Crucis Magno es un medio que llega al fin de nuestro apostolado cofrade como es la religiosidad popular.
Antes de despedirme quiero mostrar mi GRATITUD a todos vosotros mis queridos y fieles lectores así como a Pepe Moreno Fraile y Antonio Atienza por permitirme escribir mis opiniones con la máxima LIBERTAD y eso en los tiempos que corren se convierte en un auténtico privilegio.
¡Feliz verano a todos y que Dios os bendiga!
Jesús Rodríguez Arias
UNA
CITA HISTÓRICA PARA AFLIGIDOS
Quién ve iba a decir a mí que
en este último artículo del presente curso en “San Fernando Información”
escribiría de la Hermandad de mi vida, la que conozco desde que era un niño, de
la que me enamoré en la curva de Capitanía un Lunes Santo de 1978 cuando vi que
Jesús se apoyaba en Su Madre de la Amargura para que con la ayuda de ambos el
peso del dolor, del sufrimiento, de la incertidumbre y de la muerte fuese más
liviano.
El motivo no es otro que la
invitación que ha realizado el Obispado de Cádiz y Ceuta por medio del
Secretariado Diocesano para las Hermandades y Cofradías de participar con
nuestros Titulares en el Vía Crucis Magno que se tiene previsto realizar para
el año 2018 en Cádiz con motivo del 750 aniversario de nuestra Diócesis.
Cuando lo he leído he podido
saborear el auténtico privilegio que supone para nuestra Hermandad, para todos
y cada uno de sus hermanos, para el apostolado cofrade en esta bendita Isla de
León, para nuestro Arciprestazgo así como también para esta histórica y
bicentenaria Ciudad de San Fernando porque esta expresa invitación de nuestro
Obispado es una de esas oportunidades únicas a las que hay que responder con un
SI rotundo por parte de todos cuantos conformamos la nómina de Afligidos. Con
ese Si apoyamos a que nuestra Hermandad haga una vez más historia, apoyamos a
la Junta de Gobierno que nos representa para que realice y coordine toda la
ingente labor de poner nuestra Cofradía en las calles de Cádiz participando en
un hito sumamente importante para la Diócesis de Cádiz y Ceuta.
Esta participación de nuestra
Corporación Nazarena significa mucho más de lo que nos puedan decir o comentar.
Es pasar a la historia con mayúsculas como lo hiciera mi también querida
Hermandad del Prendimiento cuando participó en aquél Vía Crucis diocesano que
se organizó en Cádiz con motivo de Jornada Mundial de la Juventud que se
celebró en Madrid en agosto de 2011 con la presencia del ahora Papa Emérito, mi
siempre admirado y respetado, Benedicto XVI.
Habrá algunos que podrán decir
e incluso pensar que esto es una Salida Extraordinaria, de las muchas que hay,
para celebrar algunas de las efemérides que en estos años tenemos todos los
hermanos de Afligidos, este pensamiento como otros que se pueden plantear se
caen por si solos pues esto no es un salida ni ordinaria ni extraordinaria sino
la participación de nuestra Hermandad en el Vía Crucis que el Obispado por
medio del Secretariado de Hermandades y Cofradías está organizando como uno de
los actos centrales de este importante aniversario diocesano.
Sé por los ámbitos de
actuación en los que me muevo que el Obispado está poniendo mucha carne en el
asador para que esta celebración pase a la historia y por ello hay muchas
personas de gran valía echando esa necesaria mano para que todo salga como
tiene que salir. Ganas, ilusión y esfuerzos no van a faltar.
Apoyo a los rectores de mi
querida Hermandad de toda la vida ante el importante reto que se le ha
planteado pues supone una ocasión única. No olvidemos que oportunidades como
estas no se dan casi nunca y que es uno
de los trenes que hay que saber coger en marcha sí o sí pues te da la
oportunidad de evangelizar por medio de la religiosidad popular a muchos miles
de personas que asistirán a este magno evento. Afligidos, D.m., estará en Cádiz
y hará que la Tacita de Plata se embelese con un misterio que representa el
encuentro de Jesús y María en la calle de la Amargura.
Debo reconocer que me ha dado
mucha alegría el poder escribir sobre este tema particular este domingo en el
que Jesús sale en Presencia Viva por las calles de La Isla y con el cual me
despido de mi semanal tribuna hasta que pase el verano que será cuando
comenzará un nuevo curso donde todo estará de nuevo por hacer
.
Quiero mostrar mi gratitud
tanto a los fieles lectores que han seguido esta serie de artículos cada
domingo, a mi buen hermano Pepe Moreno Fraile, coordinador de este apartado, a
Antonio Atienza, redactor-jefe, por permitirme escribir con total libertad
cuantas opiniones han quedado reflejadas en esta tribuna. Gracias también a
Dios por permitirme ser un instrumento en sus manos.
Os hago un ruego muy personal:
Que recéis por mí ante las pruebas diagnósticas que me serán practicada a
partir de mañana 19 de junio en Madrid tras el quebranto de salud que he tenido
en los últimos meses.
Muchas gracias, de corazón y
FELIZ VERANO.
Jesús Rodríguez Arias
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