* ¿HALLOWEEN? ¡¡NO, GRACIAS!!

Es fecha de castañas asadas, de boniatos al horno e incluso de carne de membrillo. El otoño va discurriendo según sus pasos mientras esas hojas verdes que se enaltecían en la arboleda caen macilentas a nuestros pies.

Octubre se va despidiendo para dar paso a un nuevo noviembre que además de oscuro, por eso del cambio de hora, más frío, triste y melancólico también lo es de recuerdos y mucha oración por los que nos dejaron y siguen haciéndolo al día de hoy.

Fechas que según costumbre española se podía gozar con el Don Juan Tenorio de toda la vida, los huesos santos, buñuelos, cementerios inundados en flores que son la imagen visible del recuerdo así como la Misa el día de los Difuntos o a tantos difuntos a los que se le dedica una Misa en este mes tan concreto.

Aquí en España y más en Andalucía hemos convivido con el recuerdo de los que ya no están, los que fallecieron, por medio de recuerdos, plegarias o esa mariposa encendida con la imagen de la Virgen rodeada de fotos de nuestros seres queridos.

Sí, pienso que una forma muy bonita, bella, entrañable y llena de Fe en la otra vida es honrar a nuestros muertos por medio del cariño, del respeto y de la oración.

Pero de unos años a esta parte por influencias, por imposiciones o por no sé qué nuestra tierra cuando llegan estas fechas se convierte en un enorme y decrépito cementerio.

No sabía que entre los mandatarios habían tantos fans de Michael Jackson pues con tantos zombis, tantas momias, tantas tumbas abiertas, tanto olor a azufre, tanta decrepitud han convertido en una fiesta no solo la imagen terrorífica de la propia muerte sino también una fecha fijada en el calendario satánico como es hallowenn.

Y lo hacen los derecha, izquierda, creyentes y no. Lo hacen los que saben lo que hacen y los que viven en esa ignorancia supina aunque después dan el pego ofreciendo unos conocimientos intelectuales que ni están ni se le esperan.

Todos sabéis, no hace falta descubrirlo a estas alturas, que no es que sea contrario al “jalogüín” sino que le planto cara cada vez que puedo y aunque reconozco que al día de hoy es una batalla perdida sé que al final prevalecerá el sentido común, que es el menos común de los sentidos, y nuestras raíces, culturas y tradiciones se mantendrán.

El año pasado por estas fechas recuerdo que la Delegación Episcopal de Hermandades y Cofradías de la Diócesis de Cádiz y Ceuta plantó cara al “halloween” prohibiendo actos que enaltecían esta macabra fiesta a algunas hermandades que las habían patrocinado con buenos fines lo que pasa es que se equivocaron en los medios.

Se armó un estudiado revuelo mediático que salió en todos los medios de comunicación no solo de España sino del mundo.

No os supondrá extrañeza alguna que diera mi apoyo al Padre D. Juan Sánchez, Delegado Episcopal, a mi querido y buen hermano Alfonso Caravaca de Coca, Director del Secretariado de Hermandades y Cofradías de la Diócesis de Cádiz y Ceuta.

Este apoyo fue recogido por diversos medios nacionales e internacionales así como eminentemente satanistas que se topaban de bruces con el firme apoyo de SED VALIENTES y de su director en persona. Ellos prefieren la callada por respuesta porque el silencio en determinados casos es manipulable pero cuando alguna persona o medio habla alto, claro y a la cara eso tambalea sus frágiles posicionamientos.

Hoy me he encontrado un con titular en un diario provincial de Cádiz que es en sí una declaración de hostilidades que después cuando lees la noticia ves que en vez de eso es una reafirmación de las costumbres, de nuestra forma de vivirlas en un clima de severa intoxicación por medio de esta “fiesta” macabra e impostada de fuera.

“El Obispado declara la guerra a Halloween”. ¿Queda bien, verdad? Este epígrafe sin leer el contenido habrá dado ya la vuelta al mundo y serán cientos los que estarán opinando otra vez de por qué la Iglesia habla o se mete donde piensan que no tienen vela en este entierro cuando es todo lo contrario. ¿No creéis?

“El Obispado ha lanzado así una campaña que invita a las parroquias a celebrar la fiesta de Holywins. Esta celebración no pretende ser una contra halloween sino que es un modo de que  nuestros niños católicos, y lo no tan niños, podamos celebrar esta fiesta con todo su sentido”.

“Para promocionar este Holywins, la Delegación de Juventud de la Diócesis de Cádiz y Ceuta ha preparado incluso una propuesta para las parroquias con diverso material que ha puesto a disposición en su web. Allí se explica con detalle el por qué se lanza esta iniciativa, se plantean temáticas que podrían abordarse en catequesis de los pequeños los días previos y el propio 31 de octubre”.

“La fiesta prototipo que se propone desde el Obispado mezcla la diversión con una acto religioso. Así se plantea comenzar la fiesta a las cinco de la tarde con la presentación y una serie de juegos, una catequesis, concurso de disfraces, una merienda, la entrega de premios y una acto de adoración al Santísimo. La idea es que poco después de las ocho de la tarde se ponga fin al evento”.

Leyendo las directrices marcadas por el Obispado de la forma de celebrar Holywins dista mucho del epígrafe en su sentido más real aunque es verdad que si se le planta cara a halloween y sus inductores pero no desde el burdo enfrentamiento sino desde la formación y vivencia cristiana de los más pequeños y el compromiso de los mayores.

En verdad el epígrafe más correcto sería que “el Obispado reafirma la identidad católica de los fieles frente a Halloween”, pero claro eso no vende ni invita a la interpretación.

Yo, con los años me siento menos combativo y si más mesurado por lo que prefiero el olor a castañas y boniatos asados, el sabor consistente de la carne de membrillo hecha en casa, en vivir estos días conmemorando a todos los santos, rezar y recordar a nuestros difuntos así como de esos a quienes nadie reza por ellos que el olor a azufre, miedo, terror y podredumbre porque prefiero mil veces la vida que es Vida a todo lo que nos recuerde a la negrura de la muerte sin esperanza ni fe que es la que nos quieren vender como una fiesta, una celebración, un cachondeo por mor de pingües beneficios que al final no da para mucho más.

Quiero con este artículo mostrar mi APOYO al Obispado de Cádiz y Ceuta por plantar cara a Halloween, que no la guerra, con los medios más eficaces que existen: La formación cristiana a nuestros pequeños y también a nuestros mayores.

Porque la “guerra al halloween”, si es que hay que plantearla, es cosa de otros como es mi caso que enarbolo mi particular bandera en defensa de lo que pienso, opino y creo por más que algunos y otros señalen, ignoren, menosprecien o adviertan.

Jesús nos dice: ¡La Verdad os hace Libres!

Pues si la “Verdad nos hace Libres”: ¡¡SED VALIENTES!!

Jesús Rodríguez Arias