martes, 27 de septiembre de 2016

ARZOBISPO DE LOS ÁNGELES REFLEXIONA SOBRE LA MISERICORDIA FRENTE A LA PENA DE MUERTE


Pena de Muerte / Foto: Flickr Ken Piorkowski (CC-BY-SA-2.0)LOS ÁNGELES, 26 Sep. 16 / 04:28 pm (ACI).- En su nueva columna semanal, el Arzobispo de Los Ángeles (Estados Unidos), Mons. José Gómez, reflexionó sobre la misericordia como alternativa a la pena de muerte, en el marco de la votación del 8 de noviembre en California sobre una propuesta para derogar la pena capital en este estado.

La Medida 62 – tal como se conoce a este proyecto –, propone como pena máxima la cadena perpetua para los condenados por homicidio. Además estos reos trabajarían dentro de la prisión y el 60% de su sueldo iría a las familias de las víctimas.

El Prelado indicó que la pena de muerte “niega el plan de misericordia y justicia de Dios. Viola la dignidad de la persona condenada y la priva de la oportunidad de cambiar su corazón y de hacer reparación por sus crímenes”.

Mons. Gómez señaló que los obispos y él están apoyando la iniciativa contra la pena de muerte en la Conferencia Católica de California y aclaró que “al buscar ponerle fin a la pena de muerte, de ningún modo estamos olvidando a las víctimas del crimen ni a sus seres queridos, sino que los confiamos al Padre de las misericordias y le rogamos que les conceda la sanación y la paz”.

El Arzobispo de Los Ángeles recordó que “la Iglesia Católica siempre ha enseñado que los gobiernos legítimos tienen el derecho de imponer la pena de muerte a los que son encontrados culpables de los crímenes más graves. Esta enseñanza ha permanecido constante durante siglos, tanto en las Escrituras, como en los escritos de los Padres de la Iglesia y en las
enseñanzas de los papas”.


Sin embargo- prosigue- “en los últimos años, ha surgido un creciente consenso de que el uso de la pena de muerte ya no puede ser aceptado. Este consenso se refleja en el Catecismo de la Iglesia Católica, en las enseñanzas de las conferencias episcopales de todo el mundo y en las enseñanzas de Juan Pablo II, del Papa Benedicto XVI, y ahora del Papa Francisco”.

Al respecto recordó las palabras de San Juan Pablo II, que en su visita apostólica a Estados Unidos en 1999 “dijo que la pena de muerte era algo ‘cruel e innecesario’. Y es cierto”.

“Pero reconocemos que matar a un criminal no hace justicia a las víctimas. Nuestro país tiene maneras mucho más eficaces de aplicar la justicia a los asesinos y de proteger a la sociedad de los criminales violentos”, expresó.

El Prelado indicó que en lugar de condenarlos a muerte, como cristianos, “deberíamos orar por su conversión y favorecer su rehabilitación y restauración definitiva dentro de la sociedad”.

Sin embargo, “en el caso de algunos criminales, esto nunca será posible. Sus corazones están demasiado dañados, se han vuelto demasiado crueles y endurecidos. Pero sabemos que la conversión y el arrepentimiento son obra de Dios y no nuestra”.

El Prelado recordó el ejemplo de algunos de los doctores de la Iglesia, como San Agustín y San Ambrosio, que en su tiempo también pidieron a las autoridades que muestren misericordia en los casos de pena capital.

“Y, por supuesto, tenemos el testimonio de Jesucristo, que perdonó a la mujer sorprendida en adulterio, lo cual era un crimen que, en aquel tiempo, implicaba una sentencia de muerte obligatoria”, señaló.


Mons. Gómez aclaró que “la Iglesia no está cambiando su enseñanza. Los gobiernos siempre tendrán la justificación de recurrir a la pena de muerte si es necesaria para llevar a cabo su tarea de garantizar el orden social”.

“Lo que la Iglesia está pidiendo con insistencia al gobierno es que aplique la discreción, enfocándose más bien en mostrarse misericordioso como un tributo a la santidad de la vida humana y a la posibilidad de que cada persona puede encontrar la redención y la
rehabilitación”, señaló.

“En una cultura de la muerte, creo que sólo la misericordia puede ser el único testimonio creíble de la santidad de la vida y de la dignidad de la persona humana”, expresó el Arzobispo de Los Ángeles.

Puede leer la columna completa AQUÍ.

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