El Instituto para niños desfavorecidos, que asistía a 180 familias con niños discapacitados mentalmente, ya ha sido demolido y las familias esperan la transferencia de sus hijos a otra escuela
AIN.- En Lahore varias iglesias, edificios y lugares históricos, de valor artístico y religioso están en peligro de demolición debido a la nueva línea de metro diseñado y puesto en marcha por el municipio. La línea naranja de metro, de 27 km de largo también podría afectar a miles de personas a quienes causará el desplazamiento de sus hogares, para las cuales el gobierno no ha previsto ningún tipo de compensación,señalan las organizaciones de la sociedad civil.
Entre los sitios de culto que podrían que corren el riesgo de ser demolidos se encuentran las iglesias cristianas Presbiterianas de San Andrés y Naulakha, la Anglicana de la resurrección y el cementerio de Mominpura, de gran importancia para la comunidad chií en Lahore.
Mientras el Instituto para niños desfavorecidos, que asistía a 180 familias con niños discapacitados mentalmente, ya ha sido demolido y las familias están a la espera de poder transferir a los niños a otra escuela. Fides señala también que de acuerdo con el plan, escuelas, edificios, hospitales, viviendas y espacios verdes que están a lo largo de la ruta trazada, serán destruidos.
Farida Shaheed, ex relator especial de las Naciones Unidas sobre los derechos culturales, y ONG “Christian Solidarity Worldwide” han declarado respectivamente que “la destrucción de estos sitios viola el derecho de los ciudadanos y debilita significativamente el patrimonio cultural de la ciudad” y que “el gobierno de Punjab rompe las convenciones internacionales que protegen los derechos de las personas” al construir esta línea de metro.
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