EL ALBA SE ASOMA A MI ORACIÓN: "Al verla el Señor, le dio lástima y le dijo: -No llores" (Evangelio del día). Jesús, sabiendo que iba a realizar el milagro y que no era necesario estar apenado, sin embargo quiere demostrar sus sentimientos. Y no lo hace para "conmover" a la gente, lo hace porque su humanidad se manifiesta. Por otro lado evidencia el consuelo que quiere expresar, deja claro que le importa el dolor de las personas. Y esto viene a corroborar lo que dice San Pablo, en la primera lectura: "Vosotros sois el cuerpo de Cristo y cada uno es un miembro". Para Jesús, cualquier persona, y más aún la que padece, forma parte de su cuerpo. Por eso le preocupa y quiere "educarnos" en esa caridad. Pidamos al Señor que nos renueve los sentimientos hacia los demás, que el dolor del otro sea mi dolor, que no me haga inmune al padecimiento de la humanidad y que me sienta acogido por su amor y ternura. Santa María de Caná, ruega por nosotros.
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