EL ALBA SE ASOMA A MI ORACIÓN: "Me abandonaron a mí, fuente de agua viva, y cavaron aljibes agrietados que no retienen el agua". (1ª Lectura del día). Vamos muchas veces por esta vida que "cogemos el céntimo y tiramos la peseta". No aferramos a lo mediocre y dejamos lo auténtico. Pero, en el caso de la fe, es más grave. ¡Cuantas veces dejamos a Dios a un lado y corremos detrás de otros dioses (o diocecillos) pensando que nos traerá la felicidad! –adivinos, tarot, guija, quiromancia, pitonisa–. Cuantas veces acudimos a Dios porque tenemos problemas y lo abandonamos cuando la vida va bien! Y, al volver las dificultades, decimos ¿es que Dios me ha abandonado? Lo cierto es que cuando estamos en dificultad y apuros, intentamos resolverlo con nuestras capacidades y fuerzas, pensando que lo dominamos todo. –pobres de nosotros–. Si dejamos todo esto en manos de Dios, los problemas no se resolverán solos, pero si que tendremos más capacidad y paz para afrontarlo, nuestra decisiones serán más acertadas y estaremos más sosegados. Señor, que mi vida sea siempre una búsqueda de tu persona, que acuda a ti como fuente de vida y me ayudes a abandonar aquellos "dioses" que se me pegan. Santa María de Caña, ruega por nosotros.
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