¿Quién ha dicho que un regalo por ser más lujoso guste más o haga más feliz?
Pienso que en este mundo de depravado consumismo hemos llegado a perder la noción de lo verdaderamente importante, de lo que en verdad vale la pena.
Si nos fijamos en la televisión no creo que haya nada que nos pueda ilusionar porque además de unos cuantos perfumes predominan los jarabes y pastillas para la tos. ¿Hay algo más triste?
Después observamos como muchos jóvenes y también mayores ponen sus esperanzas en objetos, muchos de ellos de alta tecnología que están antiguos en el momento en los que se abren, y si son caros mejor que mejor.
Otros dan lo que no tienen por una notoriedad, por una relevancia social, por un poder que se acaba cuando se acaba.
Es decir, hay demasiados que ponen sus afanes en cosas majestuosas que cuando se tienen dejan de interesar. ¡Así es la vida del que enfoca su vida en lo material y por tanto finito!
Todos hemos tenido ilusiones y cuanto más jóvenes más pretenciosas. Cuando llegas a la madurez te das cuenta del valor de ver amanecer, de un día con todos sus matices, del silencio de la noche, de una buena conversación, de una plácida lectura, una buena película, de estar con las personas que quiere y te quieren, de la alegría de un encuentro, de la defensa de lo que crees, de escuchar buena música, de ver y observar sin grandes matices ni anhelos.
Valoras más lo que es la verdadera Amistad y la verdad de los que tienes junto a ti. Valoras del aprendizaje de los que en un momento compartieron contigo un tramo de tu vida y un día, por las circunstancias que fueran, decidieron abandonar tu navío.
Aprendes a valorar las cosas como son no como parecen.
Por eso cuando pensé en hacer un regalo a mi bendito pueblo de Villaluenga del Rosario por todo lo que me ha dado y me sigue dando a diario no me fui por los cerros de Úbeda, por algo inalcanzable que solo se quedara en un deseo sino en algo que fuese útil, que llegara a todos: ¡Un regalo de bolsillo!
Y gracias a Jose M. Espigado con su diseño gráfico y Tachy Barea con una de sus geniales fotografías se ha podido realizar el calendario de bolsillo que se ha ido repartiendo durante toda esta semana y que ha sido tan bien acogido.
Un calendario con la imagen de la Virgen del Rosario, Nuestra Patrona, salida de la cámara y la genialidad de Tachy que unido al título de mi pregón con diseño e impresión en alta calidad de Jose M. Espigado y Disprén ha hecho que un sencillo regalo llegue a tantos y sea del gusto de todos.
Un calendario exclusivo de los que se ha hecho solamente 500 unidades, que ya están casi todas repartidas a falta de algunos buenos amigos que me lo han pedido expresamente, y que muchos ya llevan en sus carteras, en sus bolsos, en sus libros o donde cada uno quiera tenerlo.
Un calendario de bolsillo ha sido mi regalo donde la sencillez que impregna mi pueblo es la mejor de las banderas.
Os doy las GRACIAS a todos por la acogida que ha tenido.
Doy las GRACIAS a mi bendito pueblo de Villaluenga del Rosario en toda su extensión por el cariño y apoyo que recibo a cada momento.
Doy las GRACIAS a Tachy Barea por hacer posible este sencillo regalo.
Doy las GRACIAS a Jose M. Espigado por su creatividad, su esfuerzo, por hacer posible mi sueño.
Y doy las GRACIAS a la Virgen del Rosario por ayudarme, cuidarme y permitírmelo.
Con GRATITUD os doy un fuerte abrazo,
Jesús Rodríguez Arias
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