Se va afianzando la sensación de intranquilidad por gran parte de los andaluces ante el gobierno radical de izquierdas que nos espera. Las premisas de, la desfasada, Izquierda Unida son claras: Republicanismo, laicismo, intervencionismo en todos los sectores de la sociedad a los que los socialistas le pondrán buena cara, porque están de acuerdo en gran parte con sus próximos socios y, sobre todo, porque no quieren perder la poltrona y, entre todas las cosas, no desean que se descubra que hay debajo de las alfombras y dentro de los cajones.
Con este panorama la jornada de huelga puede llegar a radicalizarse por estas bellas tierras andaluzas. Ahora la izquierda más anquilosada en el pasado de los viejos tiempos soviéticos se ve legitimada para todo y tienen que tener claro que ellos no han ganado las elecciones, han conseguido un gran avance, pero son la tercera fuerza política de la comunidad. Mañana, día previo, quiero tocar detenidamente el tema de la huelga y de los paniaguados de los sindicalistas.
Ante el panorama que se nos viene encima tenemos la obligación moral de plantar cara a todos los desmanes que puedan cometer.
Hoy más que nunca tenemos que ser valientes. Sed Valientes ante el régimen que nos quieren intentar implantar.
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