Praga (Lunes, 16-12-2019, Gaudium Press) Ocurre una vez al año, justo para el tiempo de Navidad: la Iglesia de Santa María de la Victoria y Santuario carmelita del Niño Jesús en Praga en República Checa recibe a fieles y peregrinos para ver la estatua del Divino Infante de Praga en su forma original; es decir, sin ropa, únicamente con su túnica de cera, tal como la estatuilla fue obsequiada a los frailes Carmelitas Descalzos por la princesa Polyxena de Lobkowitz.
| Imagen del Niño Jesús de Praga en su forma original; en su traje de cera / Foto: Kostel Pražského Jezulátka. |
El hecho llama la atención de muchos, ya que se ha acostumbrado a ver la imagen con sus preciosas túnicas de rey, como el inolvidable vestido rojo con capa de armiño, corona y el globo de oro sostenido en su mano izquierda, tal como es difundida la devoción al Niño Jesús de Praga en el mundo.
Según detalló el santuario desde la red social Facebook, el gesto de presentar al Niño Jesús de Praga únicamente con su túnica de cera es algo simbólico que llama a la reflexión y a poner la mirada en la forma como Jesús, el Hijo de Dios, llegó al mundo para la salvación de la humanidad:
"Este gesto es obviamente también simbólico: El período navideño nos recuerda que Jesús vino a este mundo en la pobreza, la fragilidad y la debilidad de un niño. Su divinidad y dignidad real, que no se había perdido en ningún momento, estaba completamente oculta bajo el aspecto de humanidad y pobreza. El hecho de que el Dios Todopoderoso haya elegido una forma de venir a este mundo no deja de fascinarnos".
El ajuar del Niño Rey
Este evento es extraordinario, pero durante el año, el Divino Infante de Praga es presentado como Rey; y como todo monarca posee un completo ajuar con un sinnúmero de vestidos, muchos de los cuales han sido obsequiados como agradecimiento a los favores otorgados por el Niño Jesús.
| Fotos: Sonia Trujillo |
Varias de estas prendas se pueden apreciar en el Santuario donde hay un pequeño museo que guarda una preciosa colección de trajes que le han regalado al pequeño Jesús desde el siglo XVIII.
La túnica más antigua que allí se conserva, fue elaborada en terciopelo de seda; ella data del año 1700. Se encuentra también un vestidito donado por la emperadora María Teresa en 1743, que posee detalles con hermosos bordados de oro. Llama la atención un vestido confeccionado por las carmelitas chinas en 1894, otro realizado por los católicos vietnamitas en 1958, o el entregado por los colombianos en la primera mitad del siglo XX en el que está bordada la bandera y escudo de Colombia.
La imagen
La venerada imagen del Niño Jesús de Praga fue elaborada en cera por un artista desconocido, mide cerca de 45 centímetros de altura, y es una de las más tiernas representaciones que existen de la infancia de Jesús, y una de las mayores devociones en el mundo: el Niño, vestido como rey, lleva una túnica larga bajo la cual se asoman las puntas de sus pies. En su mano izquierda sostiene el universo y con la derecha bendice.
La historia documentada de la imagen data de la España en el siglo XVI con la duquesa María Manrique de Lara, quien al contraer matrimonio con el caballero bohemio Vratislav de Pernstejn, llevó consigo la preciosa imagen a su nueva casa en Praga. Tiempo después, en el año 1628, su hija, la princesa Polyxena, regaló la bella imagen al Convento de los Carmelitas Descalzos de Malá Strana: la Iglesia de Santa María de la Victoria y Santuario del Niño Jesús de Praga.
Una leyenda incluso dice que esta hermosa imagen perteneció a Santa Teresa de Jesús, mística y reformadora de la Orden del Carmelo Descalzo, quien en cada fundación dejó la presencia del Niño Jesús (Ver nota relacionada: La historia del "lloroncito", el Niño Jesús de Santa Teresa).
Con información de pragjesu.cz.
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