Nació en
Santander el 19 de diciembre de 1886 y falleció en Madrid el 28 de julio de
1968, día que cumplía 28 años de su ordenación sacerdotal. En Valladolid
estudió en los Colegios Nuestra Señora de Lourdes (HH. “La
Salle ”),
y San José (Jesuitas). Derecho en Deusto y Salamanca. Abogado del Estado (en 1907);
doctor en Derecho (1908). Licenciatura en Filosofía y Letras (Universidad
Central).
Al fundar
el Padre Ángel Ayala la ACdP (1908), fue elegido presidente (1909-1935).
Director de la Escuela de Periodismo “El Debate”
(1911). A la II República (año 1931), se tuvo que adaptar,
dadas las circunstancias adversas, de forma prudente. Su colaborador, Alberto
Martín Artajo, sería presidente de la ACdP , con José Luis Gutiérrez García como
Secretario de la misma (1959-1965). Fundó el Centro de Estudios Universitarios
(CEU) y el Instituto Social Obrero.
En la Facultad de Filosofía y Teología Universidad
Católica (de Friburgo) ingresó en 1936. Y se ordenó sacerdote en 1940, con 54
años. Ya en España ejerce, como coadjutor, en la
Parroquia de Pescadores Santa Lucía, de
Santander. Crea la Residencia de Sacerdotal, en Maliaño, donde
prepara para la predicación a un grupo de sacerdotes jóvenes. Clases de
Oratoria. S. Juan de Ávila fue el ejemplo a seguir. Y en dicha localidad
santanderina estableció la Escuela de Aprendices.
También fue
capellán de prisiones. Él amaría a los presos como los amó Concepción Arenal. Y
sus homilías se hicieron muy famosas en la misa de una los domingos (“la misa
de don Ángel”). Preludio de lo que sucedería en Málaga como obispo, en la
catedral abarrotada, y con altavoces en las calles. Y Radio Nacional las
retransmitía a petición de Franco. ¿Por devoción? ¿Por otra causa? Quién sabe…
Ingente su
labor desde que entró en Málaga, como Obispo (12 de Octubre de 1947). Fundó la Escuela Social Sacerdotal de Málaga (1948), que
con carácter nacional sería el Instituto Social León XIII, con sede en Madrid (desde
1950). Y también crea la Escuela de Ciudadanía Cristiana. Lo
social fue su obsesión, como lo había sido para el Padre Ayala. Y en este
sentido, su obra fundamental fueron las Escuelas-Capilla Rurales (creó 250),
para la instrucción y formación de jóvenes analfabetos, donde las mujeres, Maestras,
jugaron un papel relevante. Escuelas que “son el gran milagro del cardenal
Herrera” (Rafael Pineda). Fundó La Biblioteca de Autores Cristianos (La BAC ). Pablo VI le tuvo gran afecto,
y le llamaba “El Maritain Español”. En 1965 le nombró Cardenal. Participó en el
Concilio Vaticano II en los debates sobre la
Iglesia
en el mundo moderno.
San Pablo,
Santa Teresa, San Juan de la Cruz y la
Biblia ,
fueron vidas y obras preferidas. “Si quieres darte a la vida activa, llénate
primero de la vida interior”. El ideal de santidad empapó todos sus días con
devoción especial a la
Virgen
María.
Francisco Rico Pérez
No hay comentarios:
Publicar un comentario