Llegó y pasó, como un día normal, es que era un día normal. Los Medios de Comunicación y todo el mundo no hacía más que nombrarte hace meses, como el día de los sueños. Arrebataste al día de Reyes su imágen del Día de la Ilusión por unos meses y ahora sabemos que eras un día de lo más normal, de lo más corriente.
Sí, ya pasó el tan traído y llevado: 11/11/11. Me alegro de los afortunados que le hayan tocado la lotería que ese día se jugaba en la ONCE. Los cupones se agotaron en toda España. ¡Lo que es la necesidad! Todo el mundo se hacían cábalas e imaginaban lo que iban o no iban hacer con la cantidad de millones de euros que podían tocar. Los sueños se dispararon: Los que trabajan, imaginaban que dejaban de trabajar, los parados y los que están pasándolo muy mal; que la mala racha se acababa. Todos, en definitiva, pensaban en positivo y con optimismo ante el pesimismo reinante.
Pero, llegó y pasó. La gran mayoría no le ha tocado más que quedarse como estaba, no peor sino igual. Y digo yo, el dinero ayuda y mucho pero si tenemos amor, una familia que nos quiere y apoya en todos los momentos, tenemos salud, tenemos buenos y entrañables amigos, por lo menos, aunque sigamos igual que el jueves seguimos luchando. Tenemos que luchar, con todas nuestras fuerzas, contra la desesperanza, contra el hastío, contra la apatía, el aburrimiento, contra nosotros mismos cuando nuestros pensamientos nos aboquen al abismo. Tenemos que seguir luchando, trabajando a diario desde la situación en que nos encontremos para llegar a ser ricos en felicidad, en salud, en empleo, en confianza y en esperanza.
Pasó el 11/11/11 y llegó el 12 y mañana será 13 y así hasta que Dios lo quiera. ¡Feliz sábado 12 de Noviembre!
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