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  ¡A LAS MARISCADAS!

  La exitosa manifestación virtual contra los sindicatos sienta un precedente

  03 MAR 2012 | Itxu Díaz

  Miles de tuiteros participaron el pasado 19 de febrero en la primera manifestación virtual contra los sindicatos CCOO y UGT. Un fenómeno de protesta antisindical sin precedentes que surgió de una pequeña convocatoria informal en las redes sociales.



• Los sindicatos convocaron el pasado 19 de febrero una cadena de manifestaciones en toda España contra la reforma laboral del Gobierno de Mariano Rajoy. En paralelo, lanzaron en Twitter una campaña bajo el hashtag #Razones19F, destinada a recabar apoyos para sus concentraciones.
  Para los no iniciados en redes sociales, conviene aclarar que un hashtag es una etiqueta que sirve para agrupar los mensajes de Twitter que corresponden a un mismo tema. Cuando muchos usuarios utilizan un mismo hashtag, Twitter lo incluye en su lista de trending topics, es decir, entre las tendencias más populares del día o, dicho de otro modo, lo que más interesa a los demás usuarios.
  Así, el pasado 19 de febrero, #Razones19F agrupó en esta red miles de mensajes de respaldo a la manifestación de los sindicatos, convirtiéndose en varias horas del día en la etiqueta más utilizada por los usuarios de esta red social en España. Su éxito se convirtió en fracaso a causa de una pequeña iniciativa cibernética que explotó en otra gran convocatoria, pero esta vez contra los sindicatos.
  
  
  Momentos de ingenio
  Veinticuatro horas antes de la manifestación de CCOO y UGT inició su vuelo por internet, de boca en boca, una sorprendente iniciativa puesta en marcha por un pequeño grupo de usuarios de la red social Facebook, que no compartían las razones de los sindicatos para salir ahora a la calle, al tiempo que les recriminaban los siete años de silencio durante el Gobierno socialista.
  La propuesta de este grupo de Facebook consistía en manifestarse virtualmente contra CCOO y UGT. De una red social saltó a otra, y así la idea se extendió en Twitter durante la tarde del 18 de febrero, en donde un grupo más numeroso de ciudadanos propusieron la primera gran manifestación virtual contra los sindicatos. Durante la tarde del 18 y la madrugada del 19 de febrero, el hashtag#19FueraSindicatos recibió miles de adhesiones, convirtiéndose incluso en trending topic un día antes de la cita, convocada en Twitter para las diez de la mañana del 19 de febrero.
  Para muchos se trató de una experiencia novedosa e inédita. Desde el primer momento pudieron apreciarse importantes diferencias entre esta manifestación virtual y las protestas convencionales a pie de calle. La primera y más notable es la libertad de cada uno de los participantes para proponer sus consignas, ideas, y lemas y convertirse en anónimas insignias de la concentración en pocos minutos. Aquí no hay pancartas oficiales ni megáfonos. En Twitter, cada usuario lanza su propio ingenio. Eso propició grandes momentos de humor y crítica inteligente durante toda la manifestación.
  Eco internacional
  Los Rolex y las mariscadas fueron dos de los temas estrella. Los participantes recurrieron masivamente a su poder ilustrador para denunciar la hipocresía sindical. “¿Cuantos Rolex brillarán hoy al sol durante la manifa?”, preguntaba un manifestante a primera hora. “De la hoz y el martillo al Rolex y las mariscadas”, respondía otro. “La concentración de Rolex y ácido úrico más grande de España se encuentra en la calle Hortaleza de Madrid”, añadía un tercero, aludiendo al emplazamiento de la sede de UGT en la capital. Otro tuitero resumía así la concentración de CCOO: “Sindicalistas de crucero convocan una manifestación porque les recortan sus privilegios”. Y mientras tanto, entre mensaje y mensaje, un grito unánime invadía Twitter: “¡A las mariscadas, camaradas!”.
  A los mensajes irónicos se sumó una legión de datos con los que los manifestantes trataron de descubrir la verdadera realidad económica de los sindicatos UGT y CCOO. “Solo el 7 % de los trabajadores están afiliados a CCOO y UGT. Y no les representan ni a ellos”, denunciaba un usuario de esta red social. “El sindicalista de los 181.000 euros encabeza la manifestación de Madrid”, subrayaba otro. “Los liberados sindicales disponen de 9.000 tarjetas de crédito”, apuntaba un tercero, mientras otro apostillaba: “Los sindicatos llevan ganando miles de millones de euros desde la época de Franco y dejaron de ser auditados en 1983”.
  “Nada duele más a un prosindicalista que una empresa en la que todos están contentos”, clamaba otro manifestante en la primera concentración virtual contra los dos sindicatos mayoritarios. “Si no te gusta la reforma”, recomendaba otro, “puedes protestar, pero no vayas con los sindicatos, no han hecho nada por ti”. Al aluvión de mensajes se sumaban las adhesiones o retuiteos a los más ingeniosos, multiplicando así su efecto en toda la Red.
  El éxito de la concentración se confirmó temprano. En la primera media hora de manifestación virtual del 19 de febrero, el hashtag #19FueraSindicatos se había convertido en trending topic en España, mientras que la etiqueta #19FueraCCOOUGT emergía con fuerza hasta convertirse en tendencia mundial en Twitter. El inesperado impacto de la manifestación virtual se convertía en objeto de noticia en los principales diarios digitales, realimentando así su expansión a lo largo y ancho de la Red y cosechando más y más adhesiones.
  Entre tanto, el humor volvía a servir de vehículo a los manifestantes de la marcha virtual. “Los sindicalistas no se manifiestan en Twitter porque no saben dónde poner la silicona” se convirtió en uno de los tuits más populares de la jornada. “Ni un carterista en el centro de Madrid. Demasiada competencia”, escribía un tuitero aludiendo a la manifestación de UGT y CCOO. “Liberado sindical es una redundancia”, añadía un tercero.
  En la recta final, los manifestantes celebraban el poder de la convocatoria. “Tengo la conciencia sindical bajo mínimos. A cambio, experimento un subidón de dignidad y justicia”, confesaba uno de los participantes. “Manifestación contra los sindicatos en Twitter: a todo chorizo le llega su San Martín”, resumía otro.
  Lo que comenzó como una ocurrencia de un pequeño grupo de Facebook terminó convirtiéndose en una gran manifestación virtual, de eco internacional, y que fue recogida por toda la prensa española en las horas siguientes, interpretada como la respuesta de una parte importante de la ciudadanía a la marcha convocada por los sindicatos CCOO y UGT para el mismo 19 de febrero.
  Fin de sus privilegios
  En Twitter, los sindicatos perdieron la batalla por más que su hashtag #Razones19F se mantuviera todo el día entre los más populares: junto a las previsibles consignas contra la reforma laboral del Gobierno de Rajoy, gran parte de los mensajes que se agrupaban bajo esa etiqueta fueron críticas a la propia inacción sindical en los últimos años.
  Como sea, la protesta virtual del #19FueraSindicatos sienta un precedente en España: la posibilidad de reunir por primera vez a un elevado número de ciudadanos descontentos con los sindicatos en una misma manifestación nacional. Gente que, tal vez, no saldría a la calle a gritar frente a las sedes sindicales, pero que no encontró reparo alguno a lanzar sus gritos virtualmente desde su ordenador, en la mañana de un domingo de febrero. No en vano, algunos manifestantes secundaron la marcha desde las 9:00 de la mañana del domingo hasta las 14:00, participando activamente a través de sus ordenadores y dispositivos móviles.
  Otra de las novedades que descubrió esta forma de manifestación virtual es la posibilidad de interactuar y debatir con quienes opinan de forma diferente o, incluso, de enviar mensajes directos a los dirigentes sindicales y autoridades políticas. Así, numerosos participantes incluyeron en sus mensajes las identidades de Twitter de los sindicatos y de destacados dirigentes de los mismos, para hacerlos partícipes de sus protestas y reivindicaciones.
  Los sindicatos han prometido un 2012 caliente en las calles si el Gobierno no da su brazo a torcer, pero la legión de tuiteros que el pasado domingo 19 de febrero participaron en la manifestación virtual, se disolvió entre el clamor de organizar futuras concentraciones para protestar contra los sindicatos mayoritarios y pedir al Gobierno el fin de sus privilegios.