HALLAN RESTOS DE UNO DE LOS FOCOS DE LA EXPLOSIÓN DEL 11-M.

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  DEL TREN DE SANTA EUGENIA

  28 FEB 2012 | N. León

  El hallazgo se suma al desvelado por La Gaceta sobre un vagón oculto en las instalaciones de Renfe en Villaverde.



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  Un nuevo descubrimiento en relación al atentado del 11-Men Madrid hace resurgir la tesis de las sucesivas negligencias que se cometieron en la investigación en las jornadas previas para esclarecer el mayor atentado de la historia de España.
  Tal y como revela Libertad Digital, se han encontrado restos de uno de los vagones, foco de la explosión del tren que explotó en Santa Eugenia.
  Cuatro fueron los puntos de explosión: Atocha, Téllez, El Pozo y Santa Eugenia. Todos comenzaron a ser desguazados y convertidos en chatarra al día siguiente de los atentados, a excepción del vagón de Santa Eugenia, que fue el único que consiguió repararse para volver a operar.
  La chatarra que se extrajo durante el proceso de reparación de ese vagón se almacenó y guardó en la nave de la empresa Tafesa; una decisión que poco tenía que ver con el procedimiento habitual ya que, según explica Libertad Digital a juicio de los trabajadores de la empresa responsable, lo normal hubiera sido vender la chatarra al peso. Sin embargo, hubo orden de que aquella chatarra se guardara, lo que hubiera sido una prueba clave para esclarecer una de las mayores incógnitas del juicio: el tipo de explosivo utilizado.
  Durante el periodo de recuperación, varios miembros de la Policía y de la Guardia Civil se personaron en Tafesa para examinar el único vagón del 11-M no desguazado, por lo que desde Interior se tenía constancia de que esos restos del foco de la explosión existían.
  La chatarra extraído permaneció almacenado en ese mismo lugar hasta primeros de 2007, cuando se inició el juicio del atentado. El juez Gómez Bermúdez encargó la realización de una nueva prueba pericial para tratar de determinar el tipo de explosivo utilizado, sin embargo, a los peritos nadie les comunicó que en un hangar de Tafesa había almacenado material, como indica Libertad Digital. Tras el juicio, la empresa construyó un cobertizo para guardar los restos donde han permanecido oculto a los ojos de la Justicia.
  El vagón escondido en Villaverde
  Este nuevo hallazgo desvelado por el diario digital se suma a lo descubierto por La Gaceta el pasado 21 de enero, con la localización de uno de los vagones que fueron dañados por las explosiones que tuvieron lugar en la calle Téllez durante la mañana de los atentados del 11-M.
  Un vagón que había sido ocultado y escondido por el Ministerio de Fomento a las autoridades judiciales encargadas de la investigación de la matanza. En este caso, el coche Número 011R se encuentra estacionado y bajo control en los hangares laterales del Taller Central de Reparaciones (TCR) que Renfe tiene en la localidad madrileña de Villaverde.
  El vagón es uno de los referenciados en la investigación y se negaba su existencia. Supone otra de las pruebas clave ya que, como explicaban varios expertos a La Gaceta, “al encontrarse en medio de varias explosiones, tuvo que recibir gran cantidad de muestras que podrían esclarecer el explosivo utilizado”, una de las cuestiones fundamentales aún no esclarecidas suficientemente.