Jerusalén (Jueves, 26-11-2015, Gaudium Press) A través de una entrevista al P. Marcelo del Instituto del Verbo Encarnado y Provincial de la Congregación de Argentina, el Patriarcado Latino de Jerusalén, Israel, hizo un balance de la situación actual de los cristianos en Alepo, Siria, una de las ciudades más afectadas por el conflicto que persiste en el país. A pesar de las extraordinarias penalidades de la vida en este lugar, el testimonio de las comunidades de creyentes se convierten en "un mensaje de fe", según describió el Patriarcado.
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| Los cristianos en Medio Oriente han puesto una gran cuota de sacrificio en medio de la violencia. Foto: Abouna. |
El P. Marcelo relató que los cristianos de Siria son personas normales, como todos los demás, y que un gran número de ellos ha debido emigrar a causa de la violencia, pero su presencia en el lugar tiene es un gran testimonio. "La mayoría de los católicos que se quedaron, a pesar de todo, siguen viviendo en un increíble espíritu de fe y esperanza", indicó el sacerdote. Los creyentes enfrentan el dilema de huir para salvar sus vidas o permanecer hasta el final. "Para mí, esta experiencia debe ser vivida como un tiempo de purificación espiritual para nuestros hermanos cristianos de Siria".
"Hay muchos barrios dañados alrededor de Alepo. Los rebeldes llamados 'moderados' y fundamentalistas rodean la ciudad. Sonidos de disparos se escuchan regularmente, intercambio de fuegos, bombardeos", describió el Provincial. "Las condiciones de vida son, evidentemente, muy duras y difíciles. Las familias viven con sus reservas de agua, de la cual no queda mucho a su disposición. No hay energía".
Según el sacerdote, los ciudadanos acceden a una o dos horas de electricidad rentando generadores y a pesar de las limitaciones se abren las tiendas y los mercados, además del transporte público que continúa en funcionamiento, de forma que la vida continúa en medio de la precariedad.
En medio de sus privaciones, los cristianos encuentran ánimo en las noticias de cercanía y solidaridad de la Iglesia universal, así como al saber que el Papa y los demás creyentes del mundo están orando por ellos. "Aprecian también la presencia de los misioneros entre ellos; misioneros que decidieron venir a Siria para quedarse, a pesar de la guerra", comentó el Provincial. "Finalmente ellos, cristianos y misioneros, son los que nos transmiten un mensaje de madurez, paciencia, fe y de esperanza".
Con información de Patriarcado Latino de Jerusalén.
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