COFRADEMANÍA Bendición
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Escrito por: Andrés Cañadas 29/11/2015 | 09:12h
La Hermandad de la Paz, y por ende, la parroquia de Nuestra Señora de Fátima, ya cuentan con el Cristo crucificado con el que tanto soñaron tanto tiempo, el que desde la tarde de este pasado sábado, es venerado bajo la advocación de Santísimo Cristo de las Misericordias.
Ya no es una aspiración. Ya no forma parte de un proyecto de futuro. Ya es una hermosa realidad, que ha llegado gracias a la generosa donación del empresario jerezano Andrés Brioso, quien en su día encargó la talla a su primo, el imaginero Francisco Pinto, quien lo realizó a imagen y semejanza del sevillano Cristo de los Cálices.
Su bendición, presidida por don Buenaventura Sánchez, se produjo en el transcurso de una ceremonia -excesivamente larga- que tenía lugar en la parroquia, en coincidencia con la Misa de ocho de la tarde, ante una muy concurrida audiencia.
Aunque en principio, la Hermandad de la Paz pensó en otro nombre para la imagen, finalmente, y a instancias del Obispado, se ha optado por esta advocación, por coincidir esta llegada, con el inminente inicio del 'Año de la Misericordia'.
