Día internacional frente a la violencia contra las mujeres.
Centros y pisos de acogida, atención jurídica, psicológica, social… «nosotros lo que hacemos es atender a cada persona y acogerla desde un enfoque integral», asegura Hilde Daems, responsable del programa de trata, prostitución y mujer de Cáritas Española
Lo primero que deja claro Hilde Daems, responsable del programa de trata, prostitución y mujer de Cáritas Española, es que «cada mujer es única y tiene sus propias necesidades», por eso «la solución que ayuda a una mujer maltratada, a lo mejor no le sirve a otra». No es la misma situación la que pueda vivir una esposa violentada por su marido, que una prostituta agredida por su explotador. Aunque en ambos casos, puntualiza Daems, «es una violación de los derechos humanos de la mujer y hay que terminar con ella de inmediato».
Este razonamiento, que Cáritas Española constata a diario en los centros que tiene repartidos por toda España para ayudar a la mujer, ha llevado a la organización caritativa de la Iglesia a ofrecer «una atención individualizada a cada una de las mujeres que atendemos», explica Daems. Centros y pisos de acogida, atención jurídica, psicológica, social… «nosotros lo que hacemos –asegura la responsable– es atender a cada persona y acogerla desde un enfoque integral».
Hay solución
Hilda es optimista. Ella cree que hay solución, pero para que llegue «tenemos, entre todos, que mandar un mensaje muy claro a la sociedad: Es una lacra que hay que exterminar. Tolerancia cero». Y para ello hace falta concienciación y sensibilización. «No podemos tolerar como sociedad que haya desigualdad entre hombres y mujeres».
La responsable del programa de Cáritas Española aboga también por «una actuación contundente y concreta contra los maltratadores».
José Calderero @jcalderero
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