* LA CAMPAÑA

Creo que vamos a vivir una Cuaresma y sobre todo una Semana Santa pasada de proclama electoral ya que la coincidencia del inicio de campaña para las generales se desarrollarán en los días en el que estaremos conmemorando la Semana de Pasión por antonomasia de Jesús o lo que es lo mismo: La Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo.

Y de eso hablo hoy en mi artículo publicado como cada lunes en mi tribuna de Información San Fernando donde todo lo que escribo lo hago sobre todo como cofrade.

Jesús Rodríguez Arias 

LA CAMPAÑA

El anuncio del presidente Sánchez de convocar elecciones generales anticipadamente tras no conseguir los apoyos necesarios de los secesionistas y separatistas, que entre otros fueron los que lo pusieron en el sillón, a los presupuestos presentados por su gabinete para el domingo 28 de abril abre ante los ojos de todos los españoles una luenga campaña electoral que terminará en la madrugada de 27 de mayo pues después de las generales llegan las locales, europeas y autonómicas donde corresponda en un abrir y cerrar de ojos. Se nos presentan un trimestre de alta tensión social que invadirá cada espacio donde nos movamos pues cada cual tirará el ascua a su sardina como es normal y también corriente.

La Semana Santa se desarrollará cuando comienza una campaña electoral que se presume virulenta tal y como están los sentimientos encontrados de todos y cada uno de los españoles.

Las calles engalanadas para potenciar la solemnidad y magnitud de la Semana Santa se verán también “decoradas” con la cartelería propia de una cita electoral y los soportes donde se exponen los caretos de los candidatos emergerán en sus acotados espacios mientras las terrazas de los bares y restaurantes estarán atestadas por el personal que ha salido a ver y contemplar las procesiones.

Sería muy interesante que en las ciudades de mayor devoción y referencia turística en esta semana de pasión y de pasiones los políticos no programaran muchos actos electorales en esos días o en horas concretas pues podría darse el caso de que no vayan ni los suyos a escucharlos…

Lo bueno que tiene La Isla y poblaciones en que la Semana Santa se vive con los cinco sentidos es que por mucho que el aire esté viciado e intoxicado de proclamas políticas nosotros estaremos atentos a nuestros Titulares, presenciando los cortejos penitenciales que cada día realizan su Estación de Penitencia, a los estrenos que se estrenen este año, a esa marcha que está sonando especialmente y que gusta tanto, como se carga tal o cual paso así como la mesura de los mecidos de nuestra bendita Isla que en esos días huele especialmente a azahar, a embriagador incienso, a los roscos de la Victoria mientras se saborea una torrija de La Mallorquina y si miramos internet es para ver el parte meteorológico.

Personalmente no creo que la política ni la campaña electoral influya mucho e estos días donde la Ciudad literalmente se para ante la grandeza de una Semana Santa como la nuestra que se vive al cien por cien, con entrega, devoción y verdadero apasionamiento. Unos días que gracias a los cortejos procesionales que ponen en la calles nuestras Hermandades y Cofradías La Isla ofrece calles abarrotadas de gente, bares y restaurantes haciendo el agosto en pleno mes de abril, tiendas, comercios, mercerías, hoteles a pleno rendimiento… Sí, creo que en San Fernando en los días que dura esta semana  tan llena de Pasión aunque esté inmersa, como toda España, en plena campaña electoral no se va a notar en demasía ni en la vida real ni tampoco en la virtual porque al final lo que uno cree, quiere y ama es lo que muestra a los demás.

Sería lógico que en ciudades como San Fernando que tienen tanta tradición cofrade, que cobijan una Semana Santa que es referente, en esos días todos los partidos suspendieran por unas horas sus actos públicos porque entre otras cosas no se puede estar en misa y repicando aunque eso al final será decisión de cada cual y en todo caso todo será muy respetable.

Sé que mi opinión no le gustará a algunos políticos, con cargos o sin ellos, no gustará a los que cuestionan la religiosidad popular, los que exigen que vivamos la fe dentro de la Iglesia o en las sacristías, a los que manifiestamente nos quieren imponer la ideología del laicismo sin género de duda pero no hay que olvidar que tanto el 28 de abril como el 26 de mayo todos estamos llamados a las urnas, también los cofrades.

Pero estoy seguro que en La Isla como otros lugares donde se vive con pasión la Semana Santa la campaña electoral no se va hacer notar.

Jesús Rodríguez Arias