Con los datos ya lo ha dicho el Egopa, la agencia de sondeos de la Universidad de Granada y lo analizó ayer muy bien, como siempre, Juan M. Marqués Perales en estas páginas. Ciudadanos habría dado [utilicemos el que podríamos llamar "condicional demoscópico"] el sorpasso andaluz, el zorpazo, que es un zarpazo, al PP. Aunque eso ocurre entre el segundo y el tercer puesto, está resultando lo más comentado, porque en cabeza -gracias a una estrategia vergonzantemente conservadora, que también explicó perfectamente ayer Carlos Colón- tenemos la foto fija del sempiterno socialismo andaluz.
Con tanto análisis ya hecho, yo me voy a ocupar de lo que suena y resuena. En la radio preguntaban a los cinco partidos andaluces por la encuesta y, en las breves cuñas, cuatro de los cinco hablaron de Ciudadanos. Es un hecho estridente, que nos dice quién se está haciendo con el centro del escenario y con el mimo de los focos y, sobre todo, de los micrófonos. En una sociedad tan mediática como la nuestra, eso resulta tan importante o más que los fríos tantos por ciento de las encuestas.
El portavoz del PSOE se felicitaba, naturalmente, de su primer puesto, pero lo achacaba a la valoración positiva del pacto con C's. Supongo que ya le habrá dicho algún experto que tendría que venderlo al revés, hombre: que C's sube gracias al pacto con PSOE, por si alguien se lo cree. En el PP ya están inexorablemente abocados a criticar a C's, lo que irremediablemente le aúpa. C's crecido, no se conforma, que es su papel (protagonista). Como el de IU es avisar (Pepito Grillo) del crecimiento de la derecha, sumando el vigoroso, el decaído y también (así son en IU) al mismísimo PSOE.
La única que se atrevió a no mentar al Ciudadanos fue Teresa Rodríguez. Se le notó el agujero y, además, dio la sensación que transmite últimamente Podemos: la del ensimismamiento. Parecen muy preocupados en mirarse el ombligo (qué bien puesto su logo tan redondito). Esa idea que suena por los mentideros de que quizá no se presenten con el nombre de Unidos Podemos hace sospechar que están sufriendo una onfalitis aguda. Se masca que se van a desmarcar de su marca, y eso demostraría su absoluto desconcierto.
En nuestro ruidoso ecosistema político, hay que tener el oído muy fino, porque muchas tendencias las marcan los matices tonales, los lapsus verbales, los tartamudeos, las redundancias y los anacolutos. Estemos atentos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario