EL ALBA SE ASOMA A MI ORACIÓN: "Manteneos unánimes y concordes, con un mismo amor y un mismo sentir." (1ª Lectura del día). La unidad que nos pide el Señor no es cualquier cosa, no es un acuerdo ni un convenio. Ni siquiera es una unidad en una misma idea y, hasta me atrevería decir, en una misma espiritualidad. Es una unidad que, conteniendo los conceptos anteriores, lo supera. Y lo supera por la acción del Espíritu. Pero es ahí donde está la clave, el Espíritu actúa porque le dejamos "actuar", por nuestra determinación, por nuestra voluntad de vivir la comunidad. Por eso San Pablo utiliza el plural, "manteneos", bien avenidos, bien "hermanados". No desde nuestro "independentismo", sino desde la unidad en Cristo. Pidamos al Señor que ilumine nuestro caminar comunitario. Santa María de Caná, ruega por nosotros.
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