Medicina para la sociedad
La celebración de la Fiesta de la Familia, que tendrá lugar el día 30 de diciembre, «no se organiza en clave política, ni es un acto contra nadie», sino que busca proponer el modelo de la familia cristiana, «como respuesta a la crisis de humanidad que estamos viviendo», y que ha provocado el fracaso de miles de matrimonios y el sufrimiento de miles de hijos. Así lo explicó monseñor Reig Pla, en la presentación de la convocatoria de este año
Así se veía la plaza de Colón,
en la Fiesta de la Familia, de 2008
«Vivimos en una sociedad que está gravemente enferma»: la afirmación es de monseñor Juan Antonio Reig Pla, obispo de Alcalá de Henares y Presidente de la Subcomisión episcopal para la Familia y Defensa de la Vida, y la pronunció durante la presentación de la Fiesta de la Familia, que se celebrará el próximo día 30, en la plaza de Colón, de Madrid.
Los síntomas están a la vista
Los síntomas de esa enfermedad de la sociedad están ahí, para quien quiera verlos: «Nadie se casa para separarse, así que algo gordo está pasando para que, desde 1981, cuando se aprobó la ley del divorcio, se hayan producido dos millones y medio de rupturas», explicó Reig. Y no es el único ejemplo. Respecto al matrimonio, el número de uniones conyugales se ha desplomado -en 2010 se celebraron 50.000 bodas menos que en 1990-; desde que se aprobó la Ley del Divorcio exprés, en 2005, por cada 100 matrimonios contraídos se rompen 55 (antes de la ley eran 13 de cada 100), y, sólo en 2010, 75.000 menores sufrieron el divorcio de sus padres. A pesar de que se hacen 70.000 vasectomías al año, y de que se ha disparado el número de anticonceptivos (o precisamente por ello), la tasa de jóvenes de entre 13 y 20 años contagiados por sida en España ha pasado del 1,8% en 2004 al 9,7% en 2009. Asimismo, en España se cometen 110.000 abortos al año (somos la nación de la UE donde más ha crecido el aborto), por más que hoy nazcan en nuestro país 90.000 niños menos que en 1980, y de que tengamos uno de los índices de fertilidad más bajo del mundo, muy lejos del nivel de reemplazo generacional. Y mientras uno de cada tres estudiantes deja las aulas, el 95% de los padres ha sorprendido a sus hijos accediendo a pornografía en Internet, y el promedio de edad en que los niños se introducen en estos contenidos es a los 11 años. Por no hablar de que cada vez hay más ancianos solos: 300.000 personas mayores viven en asilos, y un millón y medio de mayores de 65 viven solos. Con todo, lo más grave es que «todavía hay quien habla del divorcio o del aborto, como si fuera un progreso, mientras que ninguno de estos datos pueden ser considerados una buena noticia, sino como un fracaso», dijo monseñor Reig.
La medicina de la familia
Un instante de la presentación de la Fiesta de este año
Pero, ¿qué tiene que ver la Misa de las Familias del día 30 con el desolador panorama expuesto por Reig Pla? Pues todo: «La familia cristiana es la respuesta a la crisis de humanidad que estamos viviendo, al olvido de la gramática humana, necesaria para custodiar los valores esenciales de la vida; porque la crisis, que está viviendo de manera particular España, necesita de aquellos que puedan custodiar el don de la vida humana y el amor matrimonial, y desde ahí, abrirse, en generosidad, a atender a las personas que están sufriendo en estos momentos de crisis». O sea, que la familia cristiana es la medicina que propone la Iglesia contra la enfermedad del egoísmo, de la crisis y del suicidio demográfico.
Hay una alternativa de vida
Como indica el lema -Gracias a la familia cristiana ¡hemos nacido!, con la coletilla los jóvenes de la JMJ-, los organizadores de la Fiesta de la Familia buscan «vincular la celebración litúrgica de la Sagrada Familia y el encuentro de Madrid, con el matiz de que los jóvenes que han participado en la JMJ se puedan incorporar para dar gracias a Dios por haber nacido y para dar gracias por su familia». Porque, a pesar de cómo está la sociedad española, la JMJ demostró que no todo está perdido y que «hay un modo alternativo de vivir y de ser jóvenes», que es «caminar con la esperanza de que, con la gracia de Dios, se pueden generar familias felices, unidas, familias cristianas».
La familia, sin ideología
Por más que algunos se empeñen en leerlo todo en clave electoral, monseñor Reig rechazó que se busque un objetivo político con esta celebración, puesto que la Iglesia defiende «la familia, sin ideologías, y es indiferente para nosotros quién gobierne», porque «estos actos no se organizan contra nadie», sino «para darle gracias a Dios porque nos ha regalado una buena noticia para España». De hecho, monseñor Reig reclamó un mayor asociacionismo familiar para vencer el estatalismo, y animó a que «los cristianos alcen su voz y puedan ser interlocutores ante cualquier Gobierno, para que no se puedan aprobar medidas contrarias a la familia».
José Antonio Méndez
Todo lo que debe saber de la Fiesta
* ¿Dónde? En la plaza de Colón, en Madrid. Los participantes también se distribuirán por la calle Génova, Recoletos y la Castellana.
* ¿A qué hora? El acto empieza a las 14:30 horas, con el rezo del Rosario, testimonios y cantos.
* ¿Y la Eucaristía? La Misa comenzará a las 16h y se prevé que termine en torno a las 17:30h.
* ¿Intervendrán líderes de realidades eclesiales? No, y tampoco los obispos de Europa, a diferencia de otros años. Sólo habrá testimonios de familias, de jóvenes y de novios, que se intercalarán entre los misterios del Rosario.
* ¿Habrá mensaje del Papa? Sí, pero será distinto a otras concocatorias, cuando Benedicto XVI intervenía en directo, desde el Vaticano, durante el rezo del Ángelus. Este año, se proyectará un video-mensaje del Santo Padre, que será grabado para la ocasión.
* ¿Quién puede ir? Todos, también para los no católicos, aunque sobre todo se convoca a los jóvenes que participaron en la JMJ y a las familias cristianas.
* ¿Y si no vivo en Madrid? No hay problema. Vendrán peregrinos de toda España, acompañados por sus obispos y cada diócesis organizará el viaje. Los autobuses aparcarán en las calles de Alcalá y en la Castellana. También vendrán peregrinos de países europeos, con sus obispos.
* ¿Pueden ir niños pequeños? La Fiesta de la Familia es para todos, también para los bebés: habrá dos cabinas de lactancia.
* ¿Habrá pantallas? Sí, pero menos que otros años, por la crisis. Habrá 4, en lugar de las 20 de otras convocatorias: una en Génova, dos en la Castellana y Recoletos, y otra en el escenario principal.
* ¿Cómo se financia? El objetivo es que se autofinancie. Los peregrinos pagarán su viaje, se pasará una bolsa durante la colecta y se podrá enviar mensajes de móvil, cuyo coste financiará el acto.
* ¿Cuánta gente irá? Por primera vez, la celebración será en viernes laborable, así que se prevé menos asistencia. La novedad hace que sea muy difícil calcular cuántos miles de personas asistirán. Razón de más para hacer un esfuerzo e ir.
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