Se dice con mucha frecuencia eso de; "que cualquier tiempo pasado fue mejor". Todo está sometido a interpretación, para algunos será así y para otros todo lo contrario.
Aunque creo que antes el Día de los Inocentes se vivía de otra manera. ¿Cómo decirlo? Sí, esa es la expresión exacta: Con inocencia.
Ese día se exageraba algo, los periódicos metían alguna noticia falsa que, la mayoría, se creían y al final no lo era: ¡¡Inocente!! En las casas todo era imaginación para dar nuestras respectivas bromas. Había otro ambiente; más sano, más familiar, más cálido. Todo lo impregnaba la inocencia. Pero ya, algunos nos hemos hecho mayores, y los más jóvenes no tienen ese candor que teníamos antes. Antes se sabía menos de la vida porque los niños éramos niños, los jóvenes éramos jóvenes y los adultos eran adultos. Ahora no, ahora se pasa de la niñez a la etapa de adulto sin querer reconocer ni experimentar cada etapa de la vida normal y lógica de un ser humano. De la inocencia de etapas anteriores se ha pasado a la "madurez" de la que estamos. Ahora todo se sabe, se experimenta, se aprende antes de consumir los tiempos que deben imperar en el normal desarrollo de las personas y de la Sociedad en si.
Para mí, el Día de los Inocentes también llevaba una doble experiencia. Durante muchos años en mi Hermandad nos reuníamos en la Casa de Hermandad de la calle Churruca para celebrar la Navidad, con unas copitas y con lo que cada uno trajese que en su mayoría eran empanadas. Se echaba una tarde-noche única de sentimientos, buen humor, conversación animada y HERMANDAD. Ahora, en los tiempos que corren, no se celebra. El motivo que cada uno lo ponga porque lo que motivaban las mismas se mantiene invariable: La Navidad se sigue celebrando en el mundo, las copas en esta fecha es un motivo para estar juntos la gente que se quiere y la Hermandad como institución sigue existiendo. ¿Qué falla? : La ganas de reunirse para celebrar entre hermanos la Navidad.
Hoy es un día para echar mano a los recuerdos, aunque algunos traigan sentimientos encontrados y llenos de melancolías.
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