Sucedió el pasado viernes afectando a uno de los pies de la imagen, que presenta una leve incisión
F.ABUIN JEREZ | ACTUALIZADO 30.06.2013 - 01:00
La hermandad del Santo Crucifijo ha determinado cerrar el acceso al altar, situado en la nave lateral de San Miguel, en el que se expone al crucificado creado por José de Arce al detectarse un leve arañazo provocado en uno de los pies de la imagen. El daño, a todas luces intencionado y pese no tener excesiva importancia, sí pone de manifiesto el desamparo que padecen las imágenes que se exponen al culto en iglesias o capillas careciendo de protección alguna, quedando desamparadas cualquier ante aviesa intención. Hay ejemplos recientes, más o menos sonados, tal vez el más llamativo fue el del Gran Poder en Sevilla, que padeció el asalto de un desequilibrado en su camarín. Pese a que el daño no es significativo, la hermandad a tomado medidas. Según informa en un comunicado, la incisión, hecha con un objeto punzante, parece que no ha traspasado la encarnadura. No obstante, la junta de gobierno ha decidido cerrar las rejas que permiten el acceso a los pies del Santo Crucifijo hasta que la restauradora de la imagen, María Paz Barbero, no lo analice y determine su alcance real. Asimismo, la cofradia explica que de detectó lo sucedido a la finalización de los cultos semanales, los viernes, cuando fueron a besar los pies del crucificado. Seguidamente, se reunió la Mesa de hermandad, con carácter de urgencia, decidiendo cerrar de forma provisional la reja que precede al altar impidiendo acercarse al Santo Crucifijo, pedir el análisis de la restauradora y " en el caso poco probable de que la restauración a nuestro Titular se demore en el tiempo, la junta de gobierno ubicará de manera provisional a María Santísima de la Encarnación en un lugar donde pueda recibir culto de manera directa".
Finalmente, la hermandad expresa "la repugnancia que nos produce a todos que existan personas de tal catadura, capaces de atacar a la representación e imagen de Cristo, además de cometer un atentado contra una pieza fundamental del patrimonio de nuestra ciudad".
Finalmente, la hermandad expresa "la repugnancia que nos produce a todos que existan personas de tal catadura, capaces de atacar a la representación e imagen de Cristo, además de cometer un atentado contra una pieza fundamental del patrimonio de nuestra ciudad".
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