* ¡VELANDO ARMAS!

No, por lo visto, no puede haber un verano tranquilo, un verano en paz, pues los mismos de siempre con las argucias de siempre se dedican no solo a "calentar" el cotarro sino de elevar una vez y otra la  voz en el desierto señalando con dedo inquisidor, no saben hacer otra cosa, aunque después tengan tanto y tanto que callar.

Sea por lo que sea la diana siempre es la misma y los tiros siempre van dirigido a quién va dirigido por esos que ahora van de buenos pero que la soberbia, el orgullo, les hace ser y sentirse como nuevos "inquisidores".

No se acuerdan estos de que antes ellos bien se encargaron de expulsar sin paliativos a los que no pensaban a su manera y ahora son estos los adalides de la bondad, de la paz, de la concordia, de los que dan la mano. ¿A quién quieren engañar?

Bueno, no me quiero enrollar que hoy estoy "calentito" pero aviso a navegantes que este "guerrero" se vuelve a subir al caballo para defender a quien siendo un ejemplar Pastor entregado, que se desvive, que se desgasta es atacado por lobos con piel de corderos y que tienen nombres, apellidos y además los conozco demasiado bien.

¡Orando estoy y velando armas!

¡DIOS NOS GUARDE DEL MAL Y SUS SECUACES!

Jesús Rodríguez Arias