EL ALBA SE ASOMA A MI ORACIÓN: "Pero, por la noche, el ángel del Señor les abrió las puertas de la celda y los sacó fuera, diciéndoles: - «Id al templo y explicadle allí al pueblo íntegramente este modo de vida.»". (Lectura del día). Hoy la meditación la hago algo más tarde, la mañana se me ha echado encima. Ayer, compartiendo en el grupo, nos dijeron que, aunque hemos vivido y experimentado la resurrección aún tenemos dudas. ¿Y a quien no le ha asaltado alguna? Esas son "nuestras prisiones" donde nos encierran o, por debilidad, inconsciencia, miedos, soñera..., nos encerramos. Da igual porque, en el fondo, me aíslo del mundo y entro en mi oscuridad, pero el ángel del Señor -quienes me ayudan y me preceden por mano del Señor- me libera y me envía a la misión. Y Dios me libera porque reconozco quien me salva, que en mi fragilidad y debilidad, Él se hace fuerte. Pidamos al Señor que nos libere de nuestras prisiones, nos haga ver su ansia de salvarnos, y tengamos paciencia y esperanza para esperar la "liberación". Santa María de la Luz, ruega por nosotros. Epílogo Pascual: "Venid a Galilea, allí el Señor aguarda; allí veréis los suyos la gloria de la Pascua."
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