El sábado 15 de octubre, más de 100 jóvenes cristianos se reunieron en Belén para el retiro de Adviento organizado por el Ministerio de Jóvenes de Tierra Santa. Viniendo de Nazaret, Ramleh, Jericó, Belén y Jerusalén, los participantes tenían entre 17 y 27 años. La consigna del día era "En tu luz, vemos la luz" (Salmo 36), [y] a través de estas palabras. Los jóvenes exploraron el Misterio del Señor que viene.
Br. Emad Kamel, quien durante los últimos dos años y medio ha sido el jefe del Ministerio de Jóvenes en Tierra Santa, organizó la reunión en colaboración con un equipo de jóvenes hermanas y frailes franciscanos. "Hemos hecho un esfuerzo por mantenernos en contacto con los jóvenes que participaron en la Marcha Franciscana de este verano", dijo el Hno. Emad, quien también es pastor asociado en Saint Catherine's en Belén "para hablar con ellos sobre la reunión del día. . ”Esta fue una experiencia interna fuerte, basada en la oración y la meditación, que también incluye una caminata en Belén, desde la Basílica de la Natividad hasta el Campo de los Pastores.
La primera parte del día se dedicó a dar la bienvenida a los jóvenes y a una introducción al día por el Hermano. Mario Hadchiti, quien recibió con entusiasmo a todos en los espacios de la Escuela Terra Santa de Belén. La enseñanza de fr. Abdel Masih Fahis cubrió el tema del día: "la luz es fundamental para todo", dijo. "Es indispensable en los rituales y las oraciones y se hace presente mediante el uso de velas. Las velas nos hablan de lo sagrado y de la presencia de Dios". "Y esto también es válido para los testigos vivos: los santos, por ejemplo, son como velas porque se consumen para dar luz." Tu misión es ser santo, ser la luz del mundo ", concluyó." pero no puedes ser la luz del mundo si tu luz no proviene de Dios. No puedes difundir esta luz sin experimentar a Dios ".
Después de la enseñanza, los jóvenes se dividieron en grupos compartidos y luego comenzó el viaje. Desde la Escuela Terra Santa, el grupo se trasladó a la Basílica de la Natividad, donde el grupo se unió a la procesión diaria y luego se detuvo por unos minutos dentro de la Gruta de la Natividad y oraron juntos antes de caminar al Campo de Pastores, el almuerzo y la Santa Misa, presidida por el Custodio de Tierra Santa, p. Francesco Patton.
"Tuve muchas preguntas cuando decidí irme a la Marcha Franciscana este verano", dijo Evelyne, de 17 años, de Nazaret. “No sabía exactamente dónde encontrar las respuestas. Entonces, sentí dentro de mí que este era el lugar correcto ". Y así fue tanto para ella como para los otros jóvenes participantes. Después de la Marcha Franciscana, participó en varias actividades, incluido el retiro en Belén. “Conocí a muchas personas de todo el mundo: Jordania, Siria, Egipto, India y toda Palestina durante la marcha y le debo mucho a Belén. Este es el lugar donde mi Dios, mi Salvador, vino desde el cielo para mí, nació para mí y esta conciencia conforta mi alma y mi cuerpo ".
Giovanni Malaspina
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