domingo, 19 de febrero de 2017

EL PLAN PREVISTO; POR ENRIQUE MONTIEL













Diario de Cádiz

De buenos políticos es tener un Plan. Y en su defecto otro, que llaman algunos el Plan B. El servicio público consiste, o debería, en adelantarse a los acontecimientos y ofrecer soluciones a los problemas que se planteen. Y lo más importante, prevenirlos, de tal modo que estén solucionados antes de que se produzcan. Digo en todo, también en los pueblos y ciudades, no sólo en lo que llaman algunos el Estado. Uno de los más recalcitrantes y repetidos es preparar todo para cuando lleguen las lluvias. Porque las lluvias llegan. Y las lluvias deben tener su natural salida al mar, a los pantanos. Lo que requiere una limpieza preventiva en los salideros para que no lleguen las inundaciones. Pero todos los años vemos esas inundaciones. Porque no están expeditas las salidas del agua, porque se ha dado licencia para construir donde no se debía, etc. ¿Aplicamos a cualquier cosa esta política preventiva? La frecuencia de accidentes en determinados lugares, que luego llama "puntos negros" es bien explicativa de cuanto pretendo decirte.
Me gustaría que te hicieras tú mismo la lista de actuaciones que habría que concluir en previsión de que luego ocurra lo desagradable o sencillamente fatal. Un ejemplo que tengo por importante: hemos sabido recientemente que a San Carlos ha llegado y ya está en funcionamiento un equipo de última generación para las resonancias nucleares magnéticas, que como se sabe es un eficaz método de diagnóstico de enfermedades. Fue programado por necesario por quien fue un buen aliado de San Fernando, el doctor Pereiro, hace poco dimitido, o cesado. Mucho tenemos que agradecerle a Rafael Pereiro, mucho. Bien, está alguien pendiente desde el gobierno municipal de las nuevas adquisiciones necesarias, de lo que conviene al Hospital de San Carlos. Es como la situación de las defensas de la ciudad y lo que se iba a hacer en el puente de Zuazo. ¿Y las otras cosas cotidianas? Como iluminar algunas calles, tan oscuras que hacen difícil la hostelería ahora que llega la Semana Santa y llegarán la primavera y el verano. ¿El conjunto de las cosas que llamaríamos propiamente "municipales" están en un listado y la alcaldesa llama a capítulo a cada responsable político o administrativo? Hay que poner el reloj en marcha sobre cada asunto. El reloj y el calendario. Observaríamos los retrasos e incumplimientos y salarían las alarmas en donde se estableciere que salten las alarmas. Y haya responsables.
El Plan previsto no lo conocemos los vecinos, está claro. Y caso de que se haya establecido, sólo algunos lo conocen. Del núcleo duro del gobierno. Pero una ciudad viva es una ciudad dinámica, que debe ir hacia la excelencia. No sólo lo mejor.
Es que decenas de millares de ojos miramos sin cesar todo lo que hay…

No hay comentarios:

Publicar un comentario