Despreciable y a la vez estimado señor:
Aunque sé que no cree en estas cosas le diré que soy un zombi, un muerto viviente o como yo digo "un muerto muy vivo".
Tengo que confesar que estoy de acuerdo con usted cuando critica ese bodrio llamado "halloween" pues aunque se ensalza lo que ensalza es una noche de "locos" donde muchos se disfrazan de lo que no querrían ser en su vida.
Yo la vivo desde la angustia pues no puedo darme el paseo de todas las noches ya que me encuentro con malas imitaciones que van llenos de alcohol, gritando, insultando y eso a mi me daba un poco de miedo.
Es una noche de festín para los vivos que no dejan en paz a los muertos aunque algunos no estemos en paz nunca pero eso es cosa nuestra.
¡Se me cae todo a pedazos con solo pensarlo!
Cuando veo a tantos demonios, algunos con canas y todo, correteando me dan ganas de mandarlos al mismo diablo. ¡Se iban a enterar de lo que es bueno!
No sabe cuanto lo comprendo. Permítame que no pronuncie su nombre pero es que se me agría el carácter.
Usted critica esta fiesta sin sentido y yo abomino con todos los sentidos que me van quedando de esta "fiesta".
Y la culpa no la tienen ni los niños que se visten ni los papás que los visten. Tampoco los que ven "negocio" y solo entiende su vida a través del "parné" que en verdad es una de las armas más letales que utiliza el señor de las tinieblas para dominar al mundo que prefiere mil veces un becerro de oro que la salvación de sus almas. Sí, tenemos un mundo cuyo corazón late al ritmo de la cartera y así os va.
Los culpables son otros, los que tienen mentes perversas que son capaces de poner una vela al diablo y otros a D... ¡¡Qué no me sale nombrarlo!!
Menos mal que tan solo es una noche porque en verdad los auténticos zombies "disfrutamos" de la noche eterna.
Pero me molesta estos burdos imitadores que arruinan el trabajo de una vida dedicada al mal a base de dolor.
Yo, como usted, aunque por distintos motivos digo también: ¿Halloween? ¡¡No, gracias!!
Zombi de Lápida Rota.
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