P-M. DURIO CÁDIZ
Año 1739: el obispo Tomás del Valle decreta la creación de una hermandad de la Misericordia auspiciada por un grupo de genoveses afincados en la ciudad. Cofradía que se establece en el convento que fundan los carmelitas en la Alameda. Año 1771: después de que la cofradía genovesa se trasladara a Santo Domingo (siguiendo los pasos contrarios a lo que haría una década antes la cofradía del Carmen, hasta entonces en Santo Domingo) se da por finalizada la construcción del retablo de mármol situado en el crucero de la iglesia de Santo Domingo, y que desde el 20 de mayo de 1771 presidirá la representación de la aparición de la Virgen de la Misericordia al genovés Antonio Botta. Año 1956: la hermandad de la Misericordia de Savona cuenta solo con su hermano mayor (Manuel de Cos) y un hermano más, hasta terminar por perderse el rastro de la corporación y de ese grupo escultórico.
Esta era, hasta el pasado fin de semana, la historia de la cofradía de la Misericordia de Savona. Pero la iglesia de Santo Domingo ha recuperado esta histórica advocación, coincidiendo curiosamente con el final del Año de la Misericordia (advocación de la Virgen) y en plena antesala del tricentenario del traslado a Cádiz de la Casa de Contratación (con la importancia que la población genovesa tuvo en la ciudad en esa época). "Era el deseo de un grupo numeroso de gaditanos, del que posiblemente a su cabeza estuviera Miguel Ángel Castellano y en el que también participaban nombres como el desaparecido Ángel Mozo o los hermanos Alonso de la Sierra", destaca el prior dominico, Pascual Saturio.
La recuperación de la Misericordia de Savona en Santo Domingo está unida, además, a una curiosa historia. Hace unos años, cuando se instalaba en este templo un belén con figuras de tamaño natural, se trajeron a Cádiz dos imágenes de conventos dominicos de Sevilla. Y curiosamente, una de ellas tenía una clara semejanza con la primitiva Misericordia (cuyo paradero es desconocido actualmente). En concreto, indica Saturio que se trataba de una Virgen del Rosario que recibía culto en el convento de Santa María la Real de Sevilla, que cedieron a Cádiz las monjas dominicas. "Fue a raíz de este incidente, que dio lugar a muchos comentarios, cuando planteamos la recuperación de esta advocación", relata.
No obstante, ha habido que esperar una serie de años -"hasta que las condiciones han sido las idóneas", precisa Saturio- para ver a la genovesa advocación de nuevo en el altar que ocupó desde 1771 hasta mediados del siglo pasado. Y es que el prior dominico indica que esta novedad responde a la reubicación de imágenes y retablos que en los últimos años se está llevando a cabo en Santo Domingo, donde desde el pasado fin de semana revive parte de la historia de la ciudad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario