A las 1:40 PM, por Luis Santamaría
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En la actualidad hay 5.071 confesiones religiosas registradas ante el Ministerio del Interior de Colombia, según informa Caracol Radio. Mensualmente se presentan entre 80 y 90 solicitudes para abrir una confesión no católica, lo que representa que tres veces al día cada persona quiere montar una iglesia.
La viceministra del Interior para la participación e igualdad de derechos, Natalia Gutiérrez, señaló que el Gobierno se basa en la “libertad de cultos”. “Cualquier persona puede hacer la solicitud, cualquier persona puede montar una iglesia en Colombia, como está hoy cualquier persona puede montar una iglesia en Colombia porque estamos hablando de libertad de cultos”, subrayó.
Asimismo, se refirió a las iglesias de garaje, que son varias en el país, que están funcionando de manera ilegal. “Desafortunadamente hay muchas iglesias que dicen ser iglesias que no están registradas. Estamos revisando cómo levantamos una línea base sobre qué está pasando con todo ese montón de iglesias de garaje que no están registradas en el Ministerio”, puntualizó.
La funcionaria señaló que sobre las normas tributarias hay normas especiales, las cuales están reguladas por la ley (los Concejos Municipales podrán conceder a las instituciones religiosas exenciones de los impuestos y contribuciones de carácter local en condiciones de igualdad para todas las confesiones e Iglesias).
“Ellos tienen unas condiciones especiales en el tema de tributación (…) ellos de todas maneras tienen que hacer su declaración de renta, su declaración de patrimonio, son agentes de retención, son un establecimiento que está revisado como cualquier tipo de establecimiento”, manifestó.
Al referirse a los casos que llevan a cerrar una confesión religiosa(sin importar el culto), dijo que se tiene en cuenta, entre otros, estos criterios legales: “no pueden contener actividades relacionadas con el estudio y experimentación de fenómenos síquicos o parasicológicos, no pueden estar relacionadas con temas como el satanismo y las prácticas mágicas”.
Aclaro la viceministra, que la función del gobierno frente al funcionamiento de las confesiones religiosas “es sólo el registro, ni el control, ni la revisión, ni el seguimiento de las iglesias”.
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