El P. Anand Pradhan y sor Anjali Pradhan son hermanos. Tienen otra hermana, también monja. Durante las persecuciones anti-cristianas de 2008 en Orissa (India) abandonaron su casa para salvarse. Su ejemplo es la prueba que «ni persecuciones ni amenazas pueden cambiar la voluntad de Dios».
(Asia News/InfoCatólica) Hace 10 años atrás los nacionalistas hindúes les persiguieron y destruyeron su casa durante los pogromos en el distrito de Kandhamal, en Orissa. Hoy ambos sirven a Dios y su Iglesia en la vida consagrada.
Son el p. Anand Pradhan y sor Anjali Pradhan, hermano y hermana sobrevivientes a la violencia contra los cristianos desencadenadas por los radicales hindúes en 2008. En aquel tiempo tuvieron que escapar de su pueblo de origen para poder salvar sus vidas. Y es justamente aquí, donde las familias hindúes les han siempre impedido reconstruir su casa, a donde ellos volvieron para una ceremonia de reconciliación y agradecimiento. Pero esta vez todo el pueblo hizo fiesta.
La ceremonia se realizó en Mundakanga el 29 de diciembre: dos días antes, el p.Anad fue ordenado sacerdote en la Orden de los frailes menores por Mons. Sarat Chandra Nayak (obispo de Berhampur, ndr), mientras que sor Anjali pronunció su profesión perpetua en la sociedad de Santa Ana de Lucerna (SAL). En los festejos estaban presentes más de 1.500 personas, 15 sacerdotes y 5 religiosas. Entre los participantes, también 7 familias cristianas y las 80 hindúes de la zona. Los hindúes homenajearon a los nuevos religiosos donándoles frutas y otros regalos, según la costumbre de su religión.
Recordando la violencia sufrida, durante la ceremonia el fraile apenas ordenado habló de reconciliación. «Somos indios - dijo- ciudadanos de un mismo país, de un solo Estado, como una única familia. Dios nos ha creado a su imagen y semejanza para vivir en la unidad, en la paz y en la prosperidad. La reconciliación es la gran virtud de la fe católica».
En la homilía el p. Prabodh Pradhan, el celebrante, subrayó que «destrucción, persecución y hostilidad son los deseos malvados de Satanás, no del hombre». «El motivo central de la fe católica es «ama a tu Dios y a tu prójimo como a tí mismo». Ninguna religión promueve el homicidio, el asesinato ni la persecución».
El P. Anand entró en el Seminario menor Arundaya Capuchin Ashram de Barakhoma en el año 2006, después de haber terminado el liceo en Andhra Pradesh. Emitió sus votos perpetuos en 2017. Su hermana sor Anjali entró en la congregación en 2010; hizo su noviciado en Vishakapatnam e hizo su primera profesión temporal el 21 de noviembre de 2016.
Ambos tienen otra hermana, sor Jitima Pradhan, que es parte de la congregación de la Hijas de la Caridad de S. Vicente de Paul. El ejemplo de estos treshermanos, afirma la religiosa, «demuestra que ninguna destrucción, persecución o amenaza puede cambiar la voluntad de Dios».
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