jueves, 28 de julio de 2016

XVI ENCUENTRO DE VERANO DE LAS FAMILIAS INVENCIBLES





La alegría que salva a las familias
La historia de Miguel Ángel y Nieves es habitual en muchas familias que se ven desbordadas por su día a día: «Nosotros nos habíamos conocido en la parroquia y nuestro noviazgo transcurrió entre catequesis y convivencias. Deseábamos vivir nuestro matrimonio de la mano de Dios, pero lo cierto es que, cuando empezaron los trabajos y la llegada de los niños, poco a poco nos fuimos desvinculando. Nos resultaba muy complicado compaginar nuestras nuevas obligaciones con las actividades parroquiales, y llegamos a un punto en que nos llegamos a sentir alejados de la comunidad, de la Iglesia e incluso de Dios».
Por eso, decidieron apuntarse junto a sus hijos Pablo, Blanca, Juan y Nuria, en el Encuentro de Verano que la Fraternidad de Familias Invencibles organizó en Santiago de Compostela en el año 2010: «Nos llamó mucho la atención la alegría que se vivía, la festividad de la oración compartida por toda la familia, el cuidado que se ponía en enseñanzas y catequesis, y la vivencia de fe que mostraban, profunda y sencilla al mismo tiempo. Nos sentimos enseguida como en casa, porque estas familias son realmente acogedoras. Pero lo mejor de todo no es que nosotros saliéramos encantados, sino que nuestros hijos volvieron emocionados. Tanto es así, que los siguientes años, a la hora de programar las vacaciones siempre nos decían: “pero a Familias vamos…, ¿eh?”»
Este año, junto a otras muchas familias con niños pequeños y mayores, volverán a participar en el Encuentro de Verano que Familias Invencibles va a organizar del 10 al 15 de agosto en el centro Fray Luis de León, en Guadarrama (Madrid), un encuentro todavía abierto a cualquier familia que lo desee y lo necesite, como les pasó a Miguel Ángel y Nieves: «No podemos más que dar gracias a Dios por ofrecer a nuestra familia este gran regalo. Comenzamos a vivir la fe en casa con los niños, rezábamos todos juntos y compartíamos la ilusión de volver a juntarnos con las Invencibles. Sí, Invencibles porque invencible es Dios. Además, podíamos verles compartir las cosas de Jesús con niños de su edad, de forma alegre y divertida. Con el tiempo serán libres para elegir, pero han tenido la oportunidad de experimentar la alegría de la fe, y eso nadie se lo podrá quitar».
Las familias que organizan este encuentro son conscientes de que «las familias necesitamos hoy fortalecernos en un espacio común, donde se afiance nuestra fe», por eso se presentan como «una fraternidad de familias cristianas católicas del siglo XXI que hemos experimentado la acción renovadora del Espíritu Santo y la gracia poderosa en el sacramento del Matrimonio, haciendo de nuestros hogares verdaderas Iglesias domésticas en las que se vive la oración en común, la hospitalidad, el servicio y la evangelización».
Juan Luis Vázquez Díaz-Mayordomo

No hay comentarios:

Publicar un comentario