Hoy en este precioso viernes 31 de Julio de 2015 que nos alumbra y especialmente en estas
fechas concretas del año vuelvo a escribir “desde Villaluenga y para
Villaluenga” Este próximo mes pienso que será muy prolijo en cuanto artículos
dedicados a mi bendito pueblo ya que en estos 31 días son muchos los
acontecimientos que se van a vivir, disfrutar y también sentir.
Con deciros que durante esta próxima semana se
hará la difusión oportuna al Toro de Cuerda que cada año en torno a la
festividad de San Roque organiza la Asociación del Toro de Cuerda “José María
Carrillo” de Villaluenga del Rosario y que esta vez se celebrará el próximo
sábado 8 de agosto y que desde ya os hago llegar que se hará, como en años
anteriores, el oportuno seguimiento y difusión de tal acontecimiento taurino
que forma parte de una de las tradiciones más sólidas de nuestro pueblo.
También en agosto se celebrará la Festividad de
San Roque entre otras actividades por concretar y que desde “SED VALIENTES”
tendrán su oportuna difusión tal y como merece una íntima devoción de nuestro
querido pueblo.
Difiero en esa expresión popular que dice que “uno
no es de donde nace sino de donde pace”. Yo soy gaditano de nacimiento aunque
cañaílla de origen, y estoy inmensamente orgulloso de que sea así, aunque en la
plenitud de mi vida he encontrado, porque Dios así lo ha querido, mi sitio o
lugar en el mundo que no es una importante ciudad ocupando dignos puestos que
me hagan tocar poder sino un pequeño pueblo cobijado entre montañas con poco
menos de 500 habitantes censados aunque en el día a día lo habiten los vecinos
del mismo que hacen su vida en él y que rondan los 250 porque cada uno de
vosotros me habéis enseñado con gestos y obras lo inmenso que es vivir la
grandeza de la pequeñez.
Y hoy quiero traer aquí, a este privilegiado
espacio donde cada cierto tiempo mi corazón, sentimientos y emociones se abren
para hablar de las cosas, casos, gentes, vivencias, historias, recuerdos y
ejemplos de un lugar en el mundo que siento ya tan mío como es Villaluenga del
Rosario, el ejemplo de un joven que a fuerza de trabajo, entrega, vocación va
creciendo mi admiración y cariño hacia él.
Sí, os estoy hablando de Ignacio Bonmatí Bohórquez:
¡Nuestro torero!
En él, como en muchos de nuestro querido pueblo,
se dan la mano Jerez y Villaluenga del Rosario. Sé que él quiere a Jerez y ama
a Villaluenga pues en nuestro pequeño pueblo se
encuentra a gusto, querido, admirado, reconocido por ser quien es y no
por lo que es o será, si la Santísima Virgen del Rosario, lo ayuda.
Es un hombre joven valeroso que se entrega día a
día a su verdadera Pasión: Ser matador de toros. Para eso se prepara a diario
dando el ciento por uno de su capacidad para lograr la meta que le hierve por
la sangre y que impulsa su corazón. Ama la tauromaquia como lo hace con su
Familia, con sus amigos, con sus gentes, con Jerez y por supuesto con
Villaluenga del Rosario.
Se ha preparado y lo sigue haciendo de la mano de
los buenos, de los que saben que el toreo es arte porque es una forma de vida
ya el torero lo es por vocación desde antes incluso de nacer hasta que cierra
los ojos a este mundo ya sea en una plaza de toros o alrededor de su familia en
su casa, en esa dehesa donde los toros bravos son cuidados y mimados creando un
ecosistema propio que sin ellos simplemente no existiría por más que los
ecologistas o detractores quieran decir o hacernos creer lo contrario.
Es Ignacio Bonmatí un hombre muy querido en Villaluenga
del Rosario, un joven totalmente integrado en el que es su pueblo, una persona
que siempre está ahí ayudando y participando en cuantas fiestas y tradiciones
se celebren. Lo mismo lo ves saliendo de su casa, en plena Alameda, o entrar en
la de su tío Alonso Moscoso que en la piscina dándose un remojón en su
refrescante agua, entrenando porque para estar hay que prepararse a diario,
divirtiéndose con sus amigos de siempre o cargando a San Roque, Nuestro Padre
Jesús, la Santísima Virgen de los Dolores y también en Su Soledad y por
supuesto a la Santísima Virgen del Rosario.
Por eso y por mucho más consideramos que Ignacio
es el torero de aquí pues se le quiere como lo que es y demuestra a diario:
¡Cómo a un hijo del pueblo!
He tenido el honor de presenciar su valiente y
cadencioso toreo en nuestra coqueta y única, en todos los sentidos, Plaza de
Toros. Se me ha puesto los vellos de punta con solo coger el capote, sus
andares, su valentía provocadora ante el toro que es en ese momento su
amigo-enemigo pues nadie respeta y quiere más a un toro bravo que un torero
cuando, vestido de luces, está en el albero.
Sé que tu Familia, tus seres más queridos y tus
verdaderos amigos están, estamos, muy orgullosos de ti y no porque estés dando
pasos para convertirte en lo que ya eres y tanto ansías sino porque saben de tu
esfuerzo diario, de los rigores de los entrenamientos, capeas, de entrenar la
mente para hacer fuerte el cuerpo y todo haciéndolo con humildad, desde la
pequeñez que da nuestro bendito pueblo, sin alharacas innecesarias que solo
hacen distraer de lo verdadero, de lo esencial, de lo importante que en este
caso es el de ser matador de toros que a base de paciencia, espera, sacrificio
vas aprendiendo el oficio con buenos maestros para llegar a ser un gran torero del
que todos estaremos orgullosos aunque, me lo tienes que permitir querido
Ignacio, en tu pueblo de Villaluenga del Rosario ya lo estamos.
Tienes el apoyo constante de los que más te
quieren, de los que se tiran al pozo si tú lo haces, porque eres un referente
para sus vidas, porque el verdadero amor, ya sea en la Familia, en la pareja,
con los amigos, se demuestra con hechos más que con palabras.
Un día cualquiera de cualquier día en Villaluenga
del Rosario. En la Alameda sentado en un banco Alonso Moscoso, que es toda
corrección, respeto, educación y saber estar, mientras tú junto con tu hermano
entrabáis en su casa. Me miró con ojos llenos de orgullo, de emoción, de
respeto y de amor hacia la figura de ese hombre que anteayer era un niño lleno
de ilusiones. Pocas veces en lo que dura una mirada, que es tan solo un
instante, pude percibir tanto allí condensado.
Sigue así Ignacio, sigue siendo como eres, sigue
luchando, preparándote a diario, sacando fuerzas de las flaquezas, haciéndote
fuerte cuando la debilidad nos envuelve, siendo un caballero de los pies a la
cabeza que demuestras que tienes esa sensibilidad especial, ese coraje innato,
ese valor sin medida de todo buen torero.
Sigue así Ignacio, sigue disfrutando cada minuto
que puedas del pueblo que te quiere y te admira como es nuestro bendito
Villaluenga del Rosario, de Jerez y de todos los sitios donde seguro aprendes
por derecho.
Sigue así porque el que la sigue la consigue y
preparándote a destajo no solo llegarás a donde debas llegar sino que harás ese
requiebro majestuoso para no sufrir ninguna corná ni en la plaza ni en la vida
que también las da.
Con mi admiración sincera, recibe un fraternal
abrazo “desde Villaluenga” sentimientos que hago extensivo a todos los miembros
de tu querida Familia y de los que en verdad te quieren que son legión.
Jesús Rodríguez Arias
Este artículo que hoy te dedico y que no dice más que lo que ven mis ojos que son lo que transmiten los sentimientos llenos de admiración hacia un joven, hacia una Familia, hacia lo que representas, es mi particular regalo por el día de tu santo.
Que Nuestro Padre Jesús, la Santísima Virgen de los Dolores, San Roque que le queda muy poco por salir por las coquetas calles de nuestro bendito pueblo y la Santísima Virgen del Rosario que es nuestra Divina Pastora te bendigan y guíen en todo momento y lugar porque te mereces todo lo mejor querido amigo.
¡Nos vemos en Villaluenga del Rosario!