El Patriarca católico caldeo de Babilonia, Mons. Louis Raphael Sako, dijo que el anuncio del Papa Francisco de que será creado cardenal, es “un impulso de esperanza” para una Iglesia que sido perseguida y que ha sufrido tanto como la de Irak.
En una entrevista concedida a Vatican News, Mons. Sako indicó que “¡para mí ha sido verdaderamente una sorpresa! Estoy muy agradecido”
Es un “apoyo de parte de la Iglesia universal y de la Santa Sede”, así como un impulso de esperanza, de aliento para avanzar en la reconciliación del país”, agregó.
El Patriarca católico caldeo de Babilonia comentó que “he recibido llamadas telefónicas de musulmanes, de cristianos, de gente sencilla y también de los responsables del Estado: todos me han dicho que este nombramiento es para nosotros, es para Irak, es para los musulmanes. Un musulmán me dijo que esto era para todos los creyentes en Dios”.
Preguntado por Vatican News sobre si se trata de una atención del Papa Francisco hacia los cristianos iraquíes, Mons. Sako explicó que “no es la primera vez que él piensa en la Iglesia que sufre”.
“De esta misma forma ha creado cardenal al Nuncio en Siria y hoy para Irak. Pero también para otros países: por lo tanto, él es un padre; él abre los ojos y ve dónde hay necesidad de un gran apoyo, como es el caso de este nombramiento. Y esto también significa que la Iglesia está viva, es fuerte y que debemos perseverar, permanecer, ser testigos del Evangelio”, manifestó.
Mons. Sako será creado cardenal el 29 de junio junto con otros 13 obispos, entre los cuales también figura el Arzobispo de Karachi (Pakistán), Mons. Joseph Coutts.
Luego de que el Papa Francisco anunció el 21 de mayo los nombres de los futuros cardenales, Mons. Sako ha recibido las felicitaciones de diversas autoridades políticas, civiles y religiosas de Irak.
Una luz para los cristianos perseguidos en Irak
Mons. Sako nació el 4 de julio de 1948 en la ciudad de Zakho (Irak). Realizó sus estudios primarios en Mosul, en el Seminario de St. Jean, gestionado por los dominicos. Fue ordenado sacerdote el 1 de junio de 1974 y desarrolló su ministerio pastoral en la Catedral de Mosul hasta 1979.
Obtuvo un doctorado en Patrología Oriental por el Pontificio Instituto Oriental en Roma y luego otro doctorado en Historia por la Sorbona de París. Entre los años 1997 y 2002 fue rector del Seminario Patriarcal de Bagdad.
El 27 de septiembre de 2003 fue nombrado Arzobispo de Kirkuk y recibió la ordenación episcopal el 14 de noviembre de ese mismo año. El 31 de enero de 2013 fue elegido por Benedicto XVI como el Patriarca católico caldeo de Babilonia, tras la renuncia de su predecesor, y recibió de ese mismo Pontífice la Comunión Eclesial el 1 de febrero de ese año.
Desde que el Estado Islámico (ISIS) invadió las aldeas cristianas en la Llanura de Nínive en el 2014, Mons. Sako denunció las atrocidades cometidas por los terroristas y brindó apoyo espiritual a los cristianos, que fueron ser el principal blanco de los yihadistas.
Luego de que el ISIS fuera expulsado de la zona entre el 2016 y el 2017, el Prelado ha exhortado a todos los cristianos que huyeron a que regresen a sus hogares, a colaborar con la reconstrucción del país y a instaurar la paz.
Por esta labor fue propuesto como candidato al Premio Nobel de la Paz 2018, que se entregará en diciembre de este año. Esta nominación ha sido apoyada por varias organizaciones católicas e incluso musulmanes iraquíes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario