MUCHO RUIDO; POR ENRIQUE MONTIEL

EL PINSAPAR

Mucho ruido

ENRIQUE / MONTIEL | ACTUALIZADO 31.05.2016 - 01:00

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VIENE mucho ruido. Y pocas nueces. Es lo que veo venir. Mucho ruido. Un vocerío de vacuidades y mentiras. Sí, mentiras. Porque las mentiras se gradúan. Entre cero e infinito. Ya no hablamos de mentiras y mentirijillas, que es una palabra no sé, entrañable. Hablamos de embustes, embustes gordos. Por el modo contrario. Quiero decir que si no digo, miento. Y diciendo, miento. El factor común es la mentira. Así que hasta el 26 de junio lo que se está formando es este gran barullo, una atmósfera de embustes y vocerío. ¿Lo de Barcelona? Una anécdota. Cuando lo de Barcelona sea también lo de otras muchas ciudades, será el ruido definitivo. Y vendrá lo que siempre acaba viniendo cuando esto ocurre. Mucho más en el verano que se acerca, el calor que se acerca. 

Aquí pondría fin, en el calor que se acerca. Pero para que no me digan avanzo lentamente diciendo que me gustaría que los que tienen que decir empezaran diciendo. La verdad. Desmontaran el tabladillo de muchas farsas cotidianas con la verdad desnuda. Si la tienen o la saben Y si no la tienen ni la saben, que lo digan también porque sería mejor que se fueran a sus casas pero eso es imposible, aquí no se va nadie. ¿Me garantiza usted que va a disminuir el paro durante los próximos cuatro años? Sí. ¿Sí? Sí. ¿Cuánto? Es muy difícil precisarlo. Bueno, con un margen de un 10% de error… ¿Un millón? No, un millón no. ¿Entonces? No me atrevo a aventurarlo. ¿Y los impuestos, van a subir? No es nuestra intención. ¿Sí? Sí. ¿Cuáles subirían? Ahí andamos, estudiando muy bien esto. Ya, estudiando muy bien. ¿Las pensiones? Garantizadas. No, eso no, pregunto si van a recortar las pensiones. Desde luego eso no lo queremos hacer en absoluto. ¿No lo quieren hacer? No, no, de ningún modo. ¿Entiendo que no lo van a hacer? Dependerá de muchos factores. Ah, de muchos factores. Claro, pueden ocurrir cosas no deseadas que nos obliguen a actuar sobre el Fondo, pero no lo podemos asegurar ni no asegurar. ¡Todo es siempre tan aleatorio! 

Este el modelo zigzagueante. Hay el negativo, el que niega todo. Y el que se compromete con un sí a todo. Increíbles los dos, como la experiencia nos ha enseñado. Los tres. Y por ello vivimos en una construcción teórica. Ruido. Vocerío. O silencio. Ominoso. La vida como teoría, el sufrimiento de los ciudadanos como teoría. El miedo al futuro como teoría. O religión. No como experiencia compartida de fe, como experiencia asumida de desastre. O turbulencias, tifones, galernas, volcanes, levantazo inmenso, diluvios, incendios. Meteorologías de las catástrofes.