Muchos son los que piensan que la Navidad termina en este día y no es así porque es precisamente cuando empieza.
Pensamos que los preparativos para despedir al año, recibir al nuevo así como todo lo relativo a los Reyes Magos no se encuadra en esta celebración. ¡Pues se equivocan!
En la Navidad todo gira en torno al Niño Jesús que recién nos ha nacido y por tanto viviremos unas fechas importantes para nuestra fe y también en la forma que entendemos que significa compartir.
Compartir momentos, vivencias, escuchas, silencios, caminos y senderos.
Compartir horas mirando al mismo cielo.
Compartir imágenes que se quedan para siempre en nuestros recuerdos.
Compartir alegrías, melancolías y muchos anhelos.
Compartir llamadas, mensajes, saludos, correos.
Compartir un café, una sonrisa, una cena o un almuerzo.
Compartir cariño, mimos, sentimientos.
Compartir el Amor a un Niño que es Dios de Tierra y Cielo.
Sí, nos queda tanto para compartir y tenemos tanto tiempo que os pido que no lo perdamos metiéndonos en nuestro propio hueco porque la vida sin compartir se vuelve oscura, sola, vacía, triste, sin remedio.
Compartir es vivir, es sentir, es alegría y abiertas ventanas pues Jesús nos ha nacido y nos ha llenado de Esperanza.
Queda mucho por vivir y compartir en estas fiestas.
Mañana marcharemos para seguir viviendo y compartiendo en nuestro bendito pueblo donde desde hace ya tres años muere el año y nos nace uno nuevo.
En estas fechas sé feliz porque nos ha nacido el Niño Jesús y porque estamos en Navidad y ya sabemos que "Navidad es Villaluenga".
Jesús Rodríguez Arias
No hay comentarios:
Publicar un comentario