lunes, 21 de septiembre de 2015

* EL PUZLE



Con este artículo dio comienzo mi particular "curso cofrade" en cuanto a colaboraciones en los medios de comunicación.

"El puzle" es como se titula este que ayer domingo salió publicado en INFORMACIÓN en el suplemento Cofrade que dirige mi querido amigo y buen hermano Pepe Moreno Fraile.

Os lo comparto.

Jesús Rodríguez Arias



EL PUZLE

Sí, por cada año que pasa pienso que nuestra vida es un puzle en el que tan sólo Dios mueve oportunamente las piezas. Con el rodar de los días te das cuenta que todas van encajando a pesar de nuestra incredulidad primigenia.

Hoy mi artículo, la primera pieza del puzle que compondrá este curso, va dirigido precisamente a analizar someramente los movimientos más inmediatos que tenemos en un abrir y cerrar de calendario.

Resultado de imagen de piezas puzzleEn este puzle que tendrá la imagen que cada uno quiera ponerle, la que se vea más nítidamente reflejado, estará muy lejos de las pretendidas ambigüedades que van sorteando el camino como culebras de verano.

Tengo el tablero vacío y hoy solamente estoy intentando engranar el marco. Las piezas más próximas son importantes pues en ellas se ve reflejadas el futuro más próximo de algunas de nuestras corporaciones nazarenas.

También en este tiempo de tanteo se irán perfilando las piezas centrales que conformarán este especial puzle que es tan extenso y también limitado a la duración del curso y en el caso que nos comprende es el cofrade.

En este primer tercio es el de proyectar lo que ocurrirá el primer semestre del año 2016 que está en avanzado estado de gestación y que nacerá, si Dios así lo quiere, cuando suenen las campanadas a las doce de la madrugada del 31 de diciembre al 1 de enero donde todo son parabienes aunque habría que preguntar si también son para todos.

Cómo bien sabéis trabajo en La Isla y eso me hace estar varias horas de cada día en esta preciosa ciudad de mis orígenes, parte de la semana permanezco en Jerez aunque mi lugar de residencia es Villaluenga del Rosario donde el Señor me ha regalado el prodigio de poder vivir en paz. A pesar de eso, a fuerza de cumplir mis añitos, cuando llegan estas precisas fechas voy fijándome en detalles nimios aunque interesantes y esclarecedores. Eso es una deformación personal para los que todos los días estamos ligados con la información y comunicación.

En este particular puzle se van viendo movimientos de previsibles candidatos a pregonar la Semana Santa de San Fernando. Los hay que están mejor colocados aunque puede ser esa pieza que permanece en esa esquina para no ser vista, observada, que hace y deja hacer mientras tenga todo bajo su control y que es bien vista no solo por la mayoría sino por los que realmente deciden y mandan. ¡Después las sorpresas no lo son tanto! Y con el exaltador de Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo también están las destacadas piezas de la persona encargada de inmortalizar el cartel y la talla que presidirá el Vía Crucis de cada inicio de la Cuaresma.

Verdaderamente significativos estos medidos movimientos de piezas en un puzle que en este curso en concreto tiene más piezas, por tanto más dificultad, pues al ritmo  normal se une los procesos electorales de muchas de nuestras Hermandades y Cofradías donde a su vez mueven las fichas correspondientes en el puzle que le toca a cada una.

Se aproximan tiempos de cambios aunque al final no será para tanto y todo, en mayor o menor medida, seguirá casi igual donde todos somos piezas necesarias  que conforman, según nuestro ámbito de actuación, la imagen real, no la ficticia, la inventada, la que interesa en cada momento, de un carisma extraordinario, de un apostolado que sigue abriendo las puertas de la Iglesia a tantos, con cofrades que son verdaderamente apóstoles y que por medio de sus amados Titulares hacen de sus vidas y  testimonio una entrega absoluta a Jesús, a Su Madre la Virgen María así como al prójimo donde en su rostro ven reflejado al mismo Crucificado que cada Semana Santa sale a la calle.

El puzle es una sublime obra aunque ahora en nosotros está el que sepamos conformarlo, cuidarlo y protegerlo.

Recibid un fraternal abrazo,

Jesús Rodríguez Arias

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