El pasado jueves 17 de marzo, la Asamblea de Madrid aprobó una ley radical de transexualidad e ideología de género (léala aquí) presentada por el Partido Socialista, Podemos y Ciudadanos y con la abstención del PP de la región de Madrid, que tenía su propia propuesta apenas un poco menos estricta.
El obispo de la diócesis de Alcalá, Juan Antonio Reig Pla, y los de la diócesis de Getafe,Joaquín López de Andújar y su obispo auxiliar José Rico, han respondido ahora con un análisis de esa ley. Juntos pastorean a los 2 millones de habitantes de estas diócesis madrileñas.
Los tres obispos dicen que es una norma injusta y por lo tanto nadie está obligada a cumplirla, y avisan que esta normativa se va a usar para "amordazar" con sanciones a las personas que no compartan la ideología de género ni el discurso de los lobbies LGBT sobre la transexualidad.
Los tres obispos advierten: "Con las sanciones de carácter administrativo y económico presentes en esta ley se da otra vuelta de tuerca para amordazar a los que piensen diferente y a los que quieran libremente expresar sus convicciones nacidas de una conciencia moral rectamente formada y de la necesidad de dar testimonio de las verdades que nacen de la fe y de la religión. El paso que se da en esta ley no es un paso en la buena dirección para la libertad religiosa y presagia otros horizontes más oscuros".
Los obispos declaran que su análisis se hace con todo el respeto hacia los que han promovido esta ley y sus posibles destinatarios. Pero su conclusión es contundente: «Se trata, en su esencia, de una ley injusta y, por tanto, a nadie obliga en conciencia».
La nota de los obispos señala, por ejemplo, el texto del Artículo 4 de la ley titulado Reconocimiento del derecho a la identidad de género libremente manifestada, donde se lee: «Toda persona tiene derecho a construir para sí una autodefinición con respecto a su cuerpo, sexo, género y su orientación sexual».
Pero para los obispos, este “supuesto derecho” noe xiste: es tan solo "una expresión ideológica del legislador".
Esta ideología peculiar del legislador regional madrileño, además, "choca frontalmente con la antropología cristiana que ha dado sustento y soporte a lo que se ha venido en llamar civilización cristiana u occidental. Como bien nos recordaba Benedicto XVI en su Carta Encíclica Charitas in veritate«hoy es preciso afirmar que la cuestión social se ha convertido radicalmente en una cuestión antropológica» (n. 75).
El uso de la palabra "libertad" en esa ley regional es también "un concepto ideológico que no responde a la experiencia humana", sin relación con la libertad real.
Los 3 obispos se hacen eco del Papa Francisco que en la Encíclica Laudato Si’ (n. 155) enseña: «La aceptación del propio cuerpo como don de Dios es necesaria para acoger y aceptar el mundo entero como regalo del Padre y casa común, mientras una lógica de dominio sobre el propio cuerpo se transforma en una lógica a veces sutil de dominio sobre la creación. Aprender a recibir el propio cuerpo, a cuidarlo y a respetar sus significados, es esencial para una verdadera ecología humana. También la valoración del propio cuerpo en su femineidad o masculinidad es necesaria para reconocerse a sí mismo en el encuentro con el diferente. De este modo es posible aceptar gozosamente el don específico del otro o de la otra, obra del Dios creador, y enriquecerse recíprocamente. Por lo tanto, no es sana una actitud que pretenda “cancelar la diferencia sexual porque ya no sabe confrontarse con la misma”».
Este párrafo del Papa Francisco es absolutamente incompatible con la ideología de género y transexual dictaminada en la ley regional madrileña.
Los obispos hacen además un análisis de distintos aspectos de la ley de género y transexualidad desde un punto de vista antropológico con estos capítulos:
- ciencia y técnica con conciencia,
- la ideología de género y sus derivados,
- nihilismo posthumano,
- derivación en el campo educativo y sanitario,
- derechos de los niños y de los padres,
- libertad religiosa,
- emergencia cívica de los católicos y una conclusión.
Los obispos de Alcalá de Henares y Getafe se apoyan también en un texto del Pontificio Consejo para la Pastoral de los Agentes Sanitarios: «No se puede violar la integridad física de una persona para el tratamiento de un mal de origen psíquico o espiritual. En estas circunstancias no se presentan órganos enfermos o funcionando mal; así que su manipulación medicoquirúrgica es una alteración arbitraria de la integridad física de la persona. No es lícito sacrificar al todo, mutilándolo, modificándolo o extirpándole una parte que no se relaciona patológicamente con el todo. Es por esto que no se puede correctamente asumir el principio de totalidad como criterio de legitimación de la esterilización antiprocreativa, del aborto terapéutico y la medicina y cirugía transexual» (Carta de los Agentes Sanitarios, en español n. 66 y nota 148).
La norma regional madrileña es tan radical que permite que incluso los menores de edad (que normalmnte necesitan permisos escritos de sus padres incluso para tomar medicamentos sencillos) puedan en contra de la opinión de sus padres hormonarse para evitar que su cuerpo desarrolle los rasgos de su sexo real y que también puedan mutilarse quirúrgicamente, incluso sin haber pasado por ningún tratamiento psicológico previo.
Documento de los tres obispos completo en pdf AQUÍ.
Lea los absurdos de la radical Ley Transexual de Madrid, resumidos aquí
Lea también, sobre este tema:
- Por qué dejamos de hacer operaciones de cambio de sexo: ciencia real contra ideología de género (aquí)
- ¿Es liberador cambiar de sexo? Una víctima cuenta lo que el movimiento transgénero procura esconder (aquí)
-Así destruye a la gente la ideología de género: la realidad estremecedora de su inventor, John Money (aquí)
El corto Modern Educayshun parecía exagerado... hasta que se contrasta con la ley de género que se acaba de aprobar para Madrid y lo que dice de las escuelas
No hay comentarios:
Publicar un comentario