Adelanto unas horas la publicación de mi dominical artículo que semanalmente se publica en INFORMACIÓN en el apartado que dirige y coordina mi querido y buen hermano Pepe Moreno Fraile ya que esta tarde será muy intensa allá con la Procesión del Bendito Señor San José y acá pues pasaremos una tarde hogareña en el "Mirador del Altozano" de mis queridos Beltrán y Maya en nuestro bendito pueblo de Villaluenga del Rosario. Dos maneras diferentes de celebrar un día rotundamente festivo.
Hoy le he querido dedicar mi artículo al Hermano Mayor de la Sacramental del Prendimiento de San Fernando, mi querido hermano Rafael López Ponce porque pienso que algunas veces nos callamos, con o sin intención, nuestros sentimientos de gratitud y agradecimiento hacia personas que en verdad se lo merecen.
Y hoy es un día muy bonito para hacer justicia.
Jesús Rodríguez Arias
RAFAEL LÓPEZ
PONCE
Es este mayo el mes de Jesús, no obstante se
celebran festividades tan importantes como la Ascensión, Santísima Trinidad,
Pentecostés o Corpus Christi, también es un mes muy mariano con la
Peregrinación a la Virgen del Rocío que congrega a multitud de fieles devotos
que por estar con la Reina de las Marismas son capaces transitar por
carreteras, caminos, por medio de los arenales en medio del silencio o de
plegarias cantadas. También en este mayo se conmemorará una devoción que lleva
a millones de personas todos los años a Fátima a rezar ante esa milagrosa
imagen de María que un 13 de mayo de 1917 se les apareciera a los pastorcillos
en Cova de Iría. Y de San José pues
dentro de tan solo unas horas saldrá en procesión para bendecir a nuestra
bicentenaria ciudad que lo honra como Patrón.
Mes para vivir en alegría el ser discípulos de
Jesús que glorioso asciende al Padre y nos envía a todos el Espíritu Santo para
que nos guíe y ayude en nuestra particular misión como miembros de la Iglesia
que somos desde el mismo día de nuestro bautismo. Mayo sacramental pues alberga
la festividad del Corpus Christi. Sí, es un mes para vivir la Fe en comunión y
en Hermandad.
Y si hablo de Hermandad me acuerdo
indefectiblemente de la persona a la cual quiero dedicar el artículo de este VI
Domingo de Pascua como es mi hermano en la Fe D. Rafael López Ponce.
Rafael López Ponce es Hermano Mayor de la
Sacramental del Prendimiento que radicada en el populoso Barrio del Parque cada
Martes Santo trae a San Fernando ese huerto de olivos milenarios donde fue
apresado Jesús tras el traidor besos de Judas.
No voy a ocultar que quiero y mucho a la cofradía
parqueña desde siempre y más desde que formo parte de la gran Familia que son
en sí sus hermanos. Mi inscripción en la misma se hizo delante de mi bendita
Virgen de la Amargura en el besamanos que organiza Afligidos cada 8 de
diciembre. Testigos que auspiciaron la misma: Mis queridos Rafael Ahumada y
Rafael López Carrillo.
A Prendimiento la quiero como “mía” pues bien se
han ocupado los hermanos que han ido conformando las distintas Juntas de
Gobierno de demostrármelo. Esta Cofradía puramente de barrio es un ejemplo de
vivir con pasión y dedicación este particular y precioso carisma donde todos
son importantes sin distinción alguna. Cada tarde-noche del Martes Santo esta
corporación nazarena muestra a La Isla lo que vive a diario cada día del año:
¡¡Hermandad!!
Rafael López Ponce es un hombre joven que poco a
poco va acariciando la madurez, es un hombre muy preparado en lo profesional,
un cristiano dedicado a su misión, un cofrade vocacional que ha bebido de la
fuente de generaciones pasadas, cuidando la presente y poniendo las bases de
esta cofradía en el futuro.
Hijo de mi querido y buen hermano Rafael López
Carrillo, ejemplo de cofrade, de cristiano comprometido, ejemplo de persona, de
discípulo, de trabajador en las mies que el Señor nos ha puesto. De casta le
viene al galgo cuando veo y compruebo que nuestro Hermano Mayor es en verdad el
servidor de todos y cada uno de sus hermanos. Sencillo y lleno de humildad,
sabiendo siempre estar y teniendo valentía cuando hay que dar la cara mientras
otros se la cubren con el antifaz de la vergüenza que es muy distinto al de la
penitencia.
Se cumplen cuatro años de la elección de Rafael
López Ponce como Hermano Mayor de la Sacramental del Prendimiento y pienso que
es de justicia el agradecérselo públicamente porque tanto él como los restantes
miembros de la Junta de Gobierno han hecho que los que la conformamos nos
sintamos queridos y necesarios sin distinción ni rango social alguno. Hacer una
labor como la que habéis hecho es muy difícil en este superficial mundo que hoy
en día vivimos donde “tanto tienes, o eres, tanto vales”.
Gracias querido Hermano Mayor, gracias a todos los
miembros de la Junta de Gobierno que tan dignamente diriges por hacernos sentir
y ser verdaderos hermanos en una misma Fe, en una misma Hermandad.
Jesús Rodríguez Arias
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