EL ALBA SE ASOMA A MI ORACIÓN; POR JOSÉ ANTONIO SIGLER

EL ALBA SE ASOMA A MI ORACIÓN. «Al ver el gentío, a los judíos les dio mucha envidia y respondían con insultos a las palabras de Pablo.» (1ª Lectura del día). Hay personas que no pueden soportar que otras puedan tener éxito y responden con envidias, celos y mofas. demostrando, por un lado, su carencia de humildad, su soberbia y su falta de caridad. Por otro lado, estos que "apabullan", presumen saber "más que nadie" porque, en el fondo, actúa con una especie de "defensa propia", demostrando su debilidad, y creen que su criterio está por encima de otro, no dando lugar al diálogo y al "abrazo". Por último quieren quedar el "primero", dejando a un lado al "segundo", e incluso ignorándolo, demostrando tener un clara acepción de personas. Esto puede ser un indicativo de nuestro nivel de fe y de nuestro nivel humano. Y debemos revisarlo porque no vaya ser que nos creemos que somos "élite" y venga Jesús y nos coloque en el "último puesto". Por ello. tenemos que aprender mucho de "ultimidad", esa virtud que nos hace semejante a Cristo, en la actitud, en el servicio, en la acogida y en la entrega. Por eso, aprendamos hoy a ser como san Atanasio que tuvo que soportar numerosas asechanzas por parte de los arrianos y ser desterrado en varias ocasiones. Pues que Dios nos ayude a ir "desgranando" su Palabra para hacerla vida. Santa María de Caná, ruega por nosotros.