Estamos frente al Santo Sepulcro en Jerusalén, el lugar más sagrado para todos los cristianos del mundo, el lugar donde Jesús conquistó la muerte al levantarse en la mañana de Pascua. Deseo decirles a todos y cada uno de ustedes que, en este lugar, los frailes de la Custodia de Tierra Santa, así como nuestros hermanos griegos y armenios, rezamos por ustedes todos los días.
Mis queridos amigos de los Estados Unidos, el Reino Unido y todos los países de habla inglesa, siguen creyendo, siguen esperando, siguen amando. ¡Sigue resistiéndote!
Mantenemos una distancia física, ya que es necesario para evitar la propagación del virus, pero seguimos unidos y solidarios entre nosotros, porque solo así podremos vencer al virus más letal, el virus del egoísmo, que hace pensar que es posible que podamos salvarnos a nosotros mismos. Somos una familia, estamos todos juntos en el mismo bote, estamos cerca de usted y rezamos por usted y sus seres queridos. Sigue esperando, sigue confiando y sigue amando.
¡Armarse de valor!
El p. Francesco Patton, ofm
Custodio de Tierra Santa
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