* A JESÚS CRUZ FONCUBIERTA

Siempre pienso, en base a la experiencia de la propia vida, que no hay mayor mediocridad que elegir un segundo que sirva solo para ser florero y con Jesús Cruz se cumple bien a las claras eso de que es la excepción que confirma la regla.

Conozco a Jesús Cruz Foncubierta desde años y siempre me ha parecido un hombre ponderado, de educada elegancia, de saber estar siempre con lo difícil que es eso en algunas ocasiones. Buen gestor, buen cofrade y mejor hermano.

Sé de sus aciertos y del cariño que se le profesa en su querida Hermandad de Ecce-Homo toda vez que ha sido un Hermano Mayor que ha permanecido muchos años seguidos de mandato con prórrogas incluidas cosa que es bastante complicado en los tiempos que vivimos donde el cargo transforma al hombre y no el hombre al cargo como es el caso concreto del nuevo Presidente del Consejo de Hermandades y Cofradías de San Fernando.

Llega al mismo por dimisión del anterior que por circunstancias ha tenido dejarlo antes de concluir el segundo mandato. Debo reconocer que José Manuel Rivera puede estar tranquilo ya que ha dejado el mando del navío al mejor comandante. Desde aquí le deseo todo lo mejor a Manolo Rivera y quiero que sepa que está en mis oraciones.

Sé, querido Jesús, que asumes esta responsabilidad que tiene una duración determinada como el servidor que siempre has sido y eres. Asumes la cruz de dirigir este órgano de coordinación cofrade en un momento complicado ante los frentes que se tienen abiertos. Asumes la cruz que también llevas por apellido con humilde mansedumbre que son las características propias de los que son de Jesús, ese Niñito que nos está a punto de Nacer en unos días.

Ser Presidente del Consejo de Hermandades y Cofradías de San Fernando no es cualquier cosa pues es la responsabilidad que congrega a un carisma, a un apostolado inmenso que pasa de padres a hijos de generación en generación. Sí, es la persona que detenta un enorme “poder” ya que es la cara visible de un movimiento social muy importante, también decisivo, en la ciudad de San Fernando. Esa responsabilidad, ese “poder” hay que saberlo ejercer como servidores de la Madre de Iglesia a la pertenecemos y soy consciente que Jesús Cruz Foncubierta tiene las características personales idóneas para llevar a cabo esta delicada encomienda en los tiempos que nos está tocando vivir a los católicos en un mundo y en una sociedad no solo desacralizada sino deshumanizada.

Sirvan estas palabras como mi particular felicitación ante el reto que has asumido de ser el presidente de todos los cofrades de La Isla que sabrás llevar a cabo pues el que se embebe de buenas fuentes luego dona a los demás lo que sabe, lo que ha aprendido.

Esta felicitación sería una más de las que estás recibiendo si no fuera acompañada con mi compromiso, como hermanos, como cofrades, como cristianos, de rezar por ti, de encomendarte ante el Señor para que te guíe en los momentos de oscuridad y te acompañe en los de soledad. Mi encomienda, querido Jesús, es orar para que el trabajo que tienes por delante sea siempre del agrado a los ojos de Dios y para bien de los hermanos, de los cofrades, de la Madre Iglesia y también para San Fernando a los que nos debemos y nos entregamos.

Recibe un fraternal abrazo hermano y que Dios nos siga bendiciendo,

Jesús Rodríguez Arias